¿Justicia humana o divina?
HONG KONG, Sept. 1997.- Dios no tiene nada que ver en la decisión de casos judi-ciales, según dictaminó un tribunal de Hong Kong luego que un jurado dijo que podría necesitar inspiración divina para ayudarle a tomar una decisión en un caso de violación a una niña.
“Algunas veces cuando no puedo tomar una decisión sobre un asunto bastante complejo, necesito orar”, dijo el jurado al juez.
“Hace algunos años aprendí meditación y tengo comunicación con los espíritus”.
El abogado de la defensa, John Hagon, no estuvo de acuerdo. “Esto no puede se-guir así. La guía o ayuda de un espíritu o Dios no puede ser aplicada en casos tan delicados como es el de dictar sentencias”, declaró.
Consecuencias de la intole-rancia
BOGOTÁ, Enero 1985.- Un enfurecido ga-nadero mató a tiros a un niño de 14 años porque según él con su balón de fútbol un grupo de muchachos le estaba estropean-do su jardín.
El hecho de violencia se registró en Me-dellín, la segunda ciudad de Colombia, en la residencial zona de “La Castellana”, a las nueve y media de la noche.
El joven, Andrés Horacio Zukuaga, se encontraba jugando fútbol con sus amigos en una calle que abarca su residencia y la del victimario, el ganadero Luis Escóbar, quien le hizo dos disparos de revólver por la espalda.
La intempestiva reacción del ganadero, de 60 años, originó la indignación de la ciu-dadanía del sector que trató de lincharlo, propósito que frustró la policía.
La víctima era hijo de un conocido diri-gente político conservador.
“El señor (el ganadero) estaba furioso y nos dijo sólo que nos fuéramos, que le estábamos dañando las matas del jardín. Después comenzó a disparar sin darnos tiempo de nada”, dijo uno de los compañe-ros de la víctima.
Cuando fue detenido por la policía, el ganadero tenía aún tres balas en su revól-ver calibre 38 Smith Wesson. (DPA).
Problema de descendencia
PARÍS.- Debido al juicio ganado a un ban-co de semen de París por una joven viuda que exigía que se le entregue el semen de su marido muerto afectado por el cáncer, ese banco de semen ha dispuesto que en el futuro los depositantes deben dejar un testamento sobre su destino tras su muer-te.
Por otra parte, según se informó en la ciudad de París, fracasó el intento de la viuda, Corinne Parpalaix de 21 años, de quedar embarazada mediante la insemina-ción artificial que se le había practicado 3 meses antes.
Su esposo había fallecido de cáncer de testículos y el hospital parisino de Kremlin-Bicetre se había negado en un principio a entregarle el semen de su marido argu-mentando que las probabilidades de lograr la fecundación eran reducidas ya que se disponía de poco esperma y de “mala cali-dad”.
El juicio provocó gran revuelo en la opi-nión pública francesa, debido al problema legal de la herencia del semen de un difun-to.
Corinne Parpalaix había conocido a su esposo Alain en 1981, descubriéndose po-co después que padecía de un cáncer de testículos.
Ambos acordaron que él depositaría su esperma en el banco de semen del hospi-tal para que ella pudiese tener un hijo suyo tan solo en caso de que la terapia de rayos que se le estaba practicando hubiese sal-vado su vida pero él hubiese quedado estéril.
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