Monseñor Solari anuncia su retiro para septiembre

Cochabamba, (EL DIARIO).- El arzobispo de Cochabamba, monseñor Tito Solari, anunció ayer que en el mes de septiembre deja su cargo y sus funciones como Pastor de la Iglesia Católica en este departamento debido a que cumplirá los 65 años de edad. Hace tres meses presentó su renuncia al Vaticano.

Con la sencillez y el carisma que lo caracterizan, el Arzobispo de Cochabamba reveló esta semana que este seis de agosto preside la última misa de Te Deum en la Catedral Metropolitana pues sus funciones como el máximo representante de la Iglesia Católica en Cochabamba terminan el próximo mes de septiembre.

“El regalo más grande que Dios me ha hecho es poder servir a una iglesia como Cochabamba, tantos años, me ha dado siento el privilegio de acompañar a un clero que es joven, una comunidad que busca la vida organizarse mejor, tenemos defectos que son los nuestros pero también hay un anhelo de crecimiento de servicio”, manifestó sonriendo.

Según Solari, a determinada edad, habiendo cumplido sus votos sacerdotales y servicio a la sociedad, las autoridades eclesiales deben presentar su renuncia a su santidad el Papa para dejar su cargo vacante y a disposición del Vaticano que designará una nuevo Pastor.

“La última etapa de la vida es cultivar en el corazón mucha gratitud, yo siento que he sido privilegiado, el Señor me quiere mucho a mí, entonces le debo mucho al señor no sé cómo agradecer, pero también tengo el mismo sentimiento con la gente sobre todo con mis colaboradores, el clero”, aseveró.

En la oportunidad, monseñor Solari confirmó que hoy por las fiestas patrias, celebra su última misa en su condición de Arzobispo del departamento de Cochabamba pero que continuará todavía cumpliendo sus funciones hasta que su Santidad el Papa Francisco designe a un nuevo Arzobispo para este departamento.

“Este miércoles es la última misa que presido por las fiestas patrias, pero no termino mañana seguiré todavía hasta que el Santo Padre me dé un sucesor”, enfatizó.

El arzobispo de Cochabamba reveló que en su misión pastoral le tocó estar presente y compartir momentos difíciles que atravesó el pueblo cochabambino como la guerra del agua y otros en los que siempre supo estar al lado de la gente más necesitada, abogando para que se resuelvan los conflictos y reflexionando a las autoridades.

“Han sido oportunidades que el señor me ha dado de estar muy cerca de la gente, momentos difíciles es cuando uno está más cerca de preocupa, ora, dialoga, busca soluciones, entonces se identifica mucho más con el pueblo. Doy gracias a Dios que me ha permitido vivir estos momentos”, confesó.