Directiva del TSE, inamovible

“Se reeligió la mesa directiva del TSE” fue el tuit que publicó en la red social la vocal Dina Chuquimia a las 17.42 horas cuando los vocales seguían reunidos en Sala Plena. Más tarde, a las 19 horas, todas las autoridades, excepto Chuquimia, confirmaron la noticia.

El vocal Marco Ayala fue el encargado de oficializar la reelección de la vocal Wilma Velasco como presidenta y Wilfredo Ovando como vicepresidente. Ambas autoridades dirigirán el TSE hasta el 15 de agosto de 2016.

“La designación de ambos miembros del directorio ha sido por seis votos, seis vocales hemos votado por la reelección tanto de la doctora Velasco como del doctor Wilfredo Ovando”, afirmó Ayala.

En la oportunidad, Wilma Velasco comprometió el trabajo del TSE en sentido de realizar una tarea transparente, cumpliendo las leyes y velando por el voto de la ciudadanía en las próximas elecciones.

“El TSE se ha caracterizado desde el 2010 siempre apegado a la Ley a la Constitución y nuevamente esta directiva ratifica este trabajo desarrollado apegado a la Ley a la Constitución y seguiremos trabajando transparentando cada una de nuestras actividades. Por ello, la ciudadanía, las organizaciones políticas deben tener plena confianza de que este Tribunal Supremo Electoral hará respetar su voluntad este 12 de octubre”, manifestó.

Por otro lado, el vicepresidente Ovando en relación a las críticas de parte de algunos líderes de la oposición que hablaban de pugnas internas e inestabilidad dentro el Órgano Electoral, dijo que esas posturas son solo especulaciones.

“No existe fraccionamientos, divisiones o grupos como se lo ha querido mostrar ante la población boliviana, lo que existe en el Tribunal Supremo Electoral son siete cabezas, siete formas de pensar, eso es lo más óptimo en democracia. No hay divisiones, hay diversas formas de pensar”, afirmó.

En ese marco, la autoridad subrayó al afirmar que el compromiso del TSE es a realizar un trabajo totalmente independiente de los otros órganos e imparcial, comprometido con este proceso electoral “y seguros de que nuestro trabajo va a ser totalmente transparente e imparcial, independientemente de cualquier criterio que se pueda dar de cualquier criterio que se pueda dar en la sociedad”.

ANÁLISIS

Para el analista Carlos Cordero, la reelección de la directiva del TSE es “el mal menor” y brinda “alguna confianza de que el proceso electoral llegue a buen término (.) Si Wilfredo Ovando volvía a la Presidencia, la oposición hubiera aprovechado para sostener que el proceso electoral estaba viciado”.

En ese marco, el politólogo recomendó a la directiva reelecta y a todos los vocales que de ahora en adelante se organice mejor el trabajo interno ya que esta etapa preelectoral cada día se hace más intensa.

“Deben coordinar mejor entre ellos, no tener tantas vocerías. Las vocería a veces perjudican el trabajo. Cuando cada vocal es un vocero corren el riesgo que entren en contradicciones entre ellos. Ojalá que tengan una misma línea en la información que brinden al país”, afirmó.

De la misma manera, pidió a los vocales el cumplimiento de las fechas establecidas en el Calendario Electoral, como es el caso de la entrega del padrón electoral que debe ser público 45 días antes del día de las elecciones. “Por lo menos que cumplan con su cronograma”.

Dentro de dos años culmina la gestión de los siete vocales que por ahora cumplen labores en el Órgano Electoral, puesto que según la Ley 018 los vocales desempeñan sus funciones por el lapso de seis años. Este binomio sería el último.

De acuerdo a la Ley 018, la directiva del TSE se elige por mayoría absoluta de los vocales en ejercicio. La gestión dura dos años y solo se puede reelegir una vez.

OPOSITORES

La vocera de la alianza Unidad Demócrata (UD) y candidata a la Cámara de Diputados, Jimena Costa, ve “con mucha preocupación” la reelección de la directiva del TSE porque significa que persistirán las dudas sobre el trabajo que realicen los vocales.

“Vemos con mucha preocupación. La ratificación no hace mucha diferencia porque las decisiones no las toma un presidente, las tomas cuatro de los siete en sala plena, de tal manera que no importa quiénes están en la Presidencia porque no es un órgano independiente. Todos vamos a tener una presión y un control sobre el trabajo que desempeñen los vocales del Órgano Electoral”, afirmó.