La frustración de los ancianos

Con gran sorpresa escuchamos promesas que posteriormente son tergiversadas y quedan sólo como palabras electoralistas; somos testigos, desde que se concediera a los trabajadores activos del país un segundo aguinaldo, dizque porque los mismos producen, de que en la anterior gestión hubo una actitud similar del Gobierno, olvidando que los ahora jubilados también producían, cuando estaban en condición de activos.

Lo cierto es que pese a las protestas, conatos de marchas y otros, los resultados fueron nulos, los jubilados sólo consiguieron un 3% sobre la masa de las rentas, aplicado en forma inversamente proporcional, que en realidad nada significó. Permanentemente los jubilados son burlados por altos funcionarios del Estado, esa vez gracias seguramente a canonjías para quienes quisieron iniciar una marcha desde Konani.

Los despreciados escucharon tres días antes del 6 de agosto, nacimiento de la Patria, al Presidente que dijo: “Nuestros ancianitos y abuelitos tendrán una gran sorpresa”. Bien, la sorpresa había sido un aguinaldo igual al valor de la actual Renta Dignidad, sorprendente ofrecimiento que desilusiona a los “abuelitos”. Nada más paradójico, jugar con la inocencia de un anciano que no tiene a dónde más recurrir.

Más aún que ahora se escucha una propaganda por los medios de difusión, acerca de que los ancianitos jubilados recibirán Bs. 2.600 y que los no jubilados recibirán Bs. 3.250. ¿Por qué abusan del razonamiento que hacen los abuelitos? Digo esto porque en varios lugares se dice “el Presidente nos dará un regalo fabuloso para la Navidad como aguinaldo”. Los responsables de esa propaganda seguramente son “llunkus” que quieren confundir a los abuelitos y hacer ver que el Gobierno es muy dadivoso.

Por otra parte, es necesario referirnos al anuncio que hizo el Presidente sobre destinar un porcentaje del IDH para fortalecer las Fuerzas Armadas; indudablemente es una actitud que se la debía tomar desde tiempo atrás, tal como lo hace el Gobierno chileno entregando a sus Fuerzas Armadas un porcentaje sobre la producción del cobre. Ahora bien, con el mismo desprendimiento, ¿por qué no se concede otra asignación para la salud de los bolivianos?

Además, ¿por qué con una economía tan eficiente no se dispensa anualmente una fracción para el segundo aguinaldo a los jubilados, así como un mínimo nacional a quienes no tienen ingresos por rentas? Este sería realmente un aliciente increíble para esos “ancianitos”; y el más creíble manejo de la cosa pública, porque hasta ahora sólo hemos visto una permanente distribución de recursos en varios lugares del país, ¿ese será el resultado del auge económico?

Por los datos que llegamos a conocer, según el Gobierno los bolivianos somos enemigos de los neoliberales, pero si analizamos las medidas económicas que son tomadas, así como algunas leyes, son realmente NEOLIBERALES. Bolivia está aplicando la receta del Banco Mundial, y para muestra tenemos el caso de la Ley de Pensiones, que es completamente neoliberal y contraria a los intereses de los trabajadores, donde resalta el tope del 60%, pese a existir el aporte del porcentaje Solidario.

En este punto vemos que se aplica una discriminación a todas luces: los trabajadores de todos los sectores podrán llegar a un tope de Bs. 3.200, mientras que el sector minero tendrá un tope Bs. 4.000. Sin duda es un sector que tiene mucho riesgo, por lo cual el Código de Seguridad Social desde su origen señalaba que todas las personas que trabajan en lugares insalubres tendrán una disminución en la edad de 5 años, lo prometido por el Presidente sólo ratifica el beneficio que se aplica desde 1954, (véase el Reglamento al Código de Seguridad Social), por lo tanto nada nuevo hay.

Lo nuevo del famoso CAMBIO del partido de gobierno es fundir a quienes más necesitan, enfermos y ancianos; lo que oímos es que si se concede el segundo aguinaldo, será un desembolso imposible de cumplir, el resto de ancianos que llegan a las 700.000 personas tienen que conformarse con el bono dignidad y su aguinaldo. ¿Por qué no se reduce el doble aguinaldo a los legisladores y altos funcionarios? Con ese monto, más una alícuota del Tesoro, se podrá conceder por lo menos un mínimo nacional.

Estos hechos serán conocidos por Derechos Humanos nacional e internacional, porque en Bolivia su propio Presidente se burla de los habitantes de la tercera edad, una vergüenza para el país.