Muchas obras de prioridad son postergadas por falta de atención

Vecinos de la urbanización Villa Adela Yunguyo hicieron conocer su voz de protesta debido a que, a pesar de contar casi con todos los servicios básicos, muchas obras consideradas como prioridad son postergadas por falta de atención

Entre estos proyectos destacan la construcción de un módulo policial o el mejoramiento de la infraestructura de la unidad educativa que lleva el nombre de la zona, mismo que desde hace mucho tiempo atrás se encuentra deteriorada ante la supuesta falta de atención de la Dirección Municipal de Educación.

Mientras que en el tema salud, el barrio cuenta con la infraestructura construida, pero que a falta de equipamiento e implementación de personal el mismo hasta la fecha está abandonado sin que sus habitantes puedan contar con servicios médicos que son prioridad en una zona.

Asimismo, la seguridad ciudadana es “pésima” en la zona debido a que para los más de 2.000 habitantes de Villa Adela Yunguyo solamente se destina a dos efectivos policiales para su protección, lo que es insuficiente, a raíz de la proliferación de la delincuencia y la presencia de grupos de pandillas que amedrentan, especialmente, a la juventud y la niñez.

“Hemos pedido más efectivos policiales ante el comando regional de la institución, pero no nos hacen caso, lo único que nos dicen es que no cuentan con suficiente policía, problema que ya ha generado una infinidad de asaltos y hasta atracos en nuestros domicilios en pleno día, pero a pesar de estos reclamos nadie nos hace caso”, dijo una de las vecinas.

MERCADO MODELO

Debido a que los vecinos cuentan en el barrio con un pequeño mercado improvisado, en el cual muchas de las vendedoras exponen sus productos al aire libre con el peligro de la contaminación de los mismos, se ha proyectado la construcción de un mercado modelo, el mismo que contaría con un financiamiento por parte del Estado, sin embargo esta situación es incierta porque no existe una fecha para el inicio de obras. Se estima una inversión de 3 millones de bolivianos.

La dirigencia de este mercado tiene la ilusión de contar con este mercado modelo que a decir de su diseño contaría con tres pisos, distribuidos por sectores, siendo el primero para la exposición exclusiva de verduras, segundo piso un comedor y un tercer piso destinado para oficinas de administración.