El Ejército iraquí y las tropas kurdas retomaron ayer el control de la ciudad septentrional de Suleiman Bek, ocupada durante dos meses por el Estado Islámico (EI), tras un mes de agosto en el que murieron 1.420 personas por la violencia en Irak, según cifras de la ONU.
En los combates por la recuperación de Suleiman Bek, ubicada 90 kilómetros al este de Tikrit -capital de la provincia de Saladino-, las fuerzas mixtas mataron a cerca de 30 yihadistas gracias en parte al apoyo de milicias de voluntarios chiíes y de la aviación iraquí, dijo a Efe una fuente de seguridad.