Muere bebé prematuro de mujer que fue baleada

Santa Cruz (EL DIARIO).- El bebé que esperaba la mujer que fue baleada en un asalto ocurrido el lunes pasado, falleció ayer luego de sufrir una complicación en los riñones, informó Gudmar Santos, padre de la criatura.

Sostuvo que permanecía internado en Cuidados Intensivos de Neonatología de la clínica Incor desde el día que le practicaron la cesárea a su esposa quien ingreso con muerte cerebral producto de un disparo de arma de fuego en la cabeza durante un atraco.

El bebé nació de siete meses, pero debido a que a su esposa no la atendieron a tiempo en otros centros asistenciales, la criatura tuvo sufrimiento fetal.

Santos aseveró que el pequeño estuvo un mes y 9 días hospitalizado, su familia tenía esperanzas de que salga adelante, sin embargo la noche del lunes aproximadamente a horas 21.30 horas, falleció.

Sostuvo que ayer recogió el cuerpo del bebé y junto a familiares lo trasladaron a Chané donde será sepultado junto a su madre Sandra Ramírez.

Gudmar Santos afirmó que ahora se aferra a su único hijo de tres años que quedo con él y sus abuelas, dijo que está muy afectado por esta desgracia ya que quería que el bebé se salvara.

Sandra Ramírez fue victimada por un disparo en la cabeza cuando regresaba de la feria de barrio Lindo. Ella estaba con siete meses de embarazo y estaba acompañada por su pequeño hijo de tres años.

Un sujeto la interceptó a pocos metros de su casa, le arrebato un monedero y en el forcejeo le disparo.

Su esposo peregrinó por dos centros asistenciales para que le presten auxilio inmediato, pero debido a que no contaba con dinero en ese momento para hacer el depósito no la atendieron.

Sandra Ramírez fue llevada a la clínica Incor donde llegó con muerte cerebral, tras dar a luz a su hijo falleció.

CIUDAD MÁS PELIGROSA DE BOLIVIA

Desde el pasado año, por la cadena de hechos de delincuencia que se presentan, Santa Cruz de la Sierra es considerada la ciudad más peligrosa de Bolivia.

“La situación es alarmante, no porque ya no se pueda caminar tranquilo en las calles y avenidas de la capital cruceña, si no por el miedo que siente una sociedad que se halla vulnerable, indefensa y desprotegida”, aseguró un ciudadano.

Pese a los intentos gubernamentales por evitar hechos de sangre, los vecinos continúan demandando de las autoridades mayor presencia.