FFAA exige máxima sanción para sargentos acusados de feminicidio contra una premilitar

El comandante en Jefe de las Fuerzas Armadas (FFAA), almirante Víctor Baldivieso, expresó su repudio e indignación por la supuesta acción criminal cometido por los sargentos Ángel Reynaldo M. H. (27) y Sidal C. Q. (27), del regimiento Ayacucho acantonado en la localidad de Achacachi del departamento de La Paz, acusados de feminicidio en contra de Carmen Rosa Mollo (17), el sábado 30 de agosto, luego de haber consumido bebidas alcohólicas en la casa de uno de los sospechosos, junto a su prima Vanesa Mollo (18), de quien se sospecha también sería cómplice al momento de abandonar el cuerpo en un descampado de la comunidad de Cota Cota en el municipio de Pucarani.

“El Ejército está tomando las medidas administrativas correspondientes, para que el Tribunal de Personal, aplique lo que establecen nuestras leyes y reglamentos al margen del proceso jurídico en la vía de la Justicia Ordinaria”, detalló el comandante general del Ejército, general Omar Salinas.

De manera paralela, en la localidad de Chirapaca, en un intento de aplacar los ánimos de los pobladores, el comandante del Regimiento Ayacucho, coronel Andrés Cortez, anunció a los comunarios de Chirapaca, de donde era oriunda la joven malograda que los dos sargentos serán dados de baja del Ejército y remitidos a la Justicia Ordinaria.

Sin embargo, las normas militares señala que los uniformados que deben enfrentar procesos en la Justicia Ordinaria, son remitidos a la Letra “E”, de disponibilidad, (una especie de licencia indefinida), para que asuman su defensa y una vez esclarecido el hecho, si se encuentra culpabilidad recién emiten su baja, de ser hallado inocente, es reincorporado; y de acuerdo con fuentes militares, lo que corresponde es destinarlos a lugares fronterizos como un castigo perpetuo.

En este sentido, Baldivieso puntualizó que se instruyó al Comando del Ejército, se aplique la máxima sanción, “previo proceso”, dejando entender que si se aplicara otra medida incurriría a la vulneración de la presunción de inocencia.

ANTECEDENTES

Carmen Rosa Mollo y Vanesa M. aceptaron consumir bebidas alcohólicas en el cuarto de uno de los imputados, ubicado frente del Estadio del poblado. Descartando la versión de la sobreviviente, se presume que luego de embriagarse, incluso llegando a los vómitos, los uniformados trataron de forzarlas a tener relaciones sexuales y cuando Carmen Rosa Mollo se defendió fue golpeada en la cabeza; lesión que habría provocado su muerte.

Según el testimonio de Vanesa M., la mañana siguiente despertó en la cama, semidesnuda con el cuerpo de su prima al lado y el presunto asesino, quien con el argumento de presentarse a la formación en el cuartel se marchó indicándole que limpiaran todo antes de irse. Ángel Reynaldo M.H. no se percató de que Carmen Rosa Mollo estaba sin vida.

TORTURA EN CHÚA

En referencia a la denuncia de los 81 estudiantes de la Universidad Indigena Túpac Katari, Baldivieso afirmó que no se tenía el informe oficial, por lo que aún no se conoce el tipo de sanción para quienes hayan cometido excesos al momento de impartir instrucción de orden cerrado.

Producto de un convenio firmado entre esta universidad y el Ejército, los 81 estudiantes de la carrera de Veterinaria habrían asistido al Batallón de Infantería de Marina “Chúa” de la provincia Omasuyos de La Paz, para recibir formación en valores y defensa del Estado, el hecho acaeció los pasados 3 y 4 de septiembre.