Universitaria no recibió atención médica oportuna

La universitaria Rebeca Quispe Peralta, estudiante de la carrera de Veterinaria de la Universidad Indígena Aymara Túpac Katari, quien denunció haber sido humillada y golpeada junto a 83 de sus compañeros en el Regimiento Chua no habría recibido atención médica oportuna, según denunciaron universitarios que solicitaron la reserva de su identidad.

De acuerdo con el relato del denunciante, el pasado jueves 4 de septiembre la joven retornó al campus universitario de Cuyahuani, donde, al presentar contracciones musculares por golpes en la cabeza, el tórax y la espalda además de orinar sangre, tuvo que ser revisada por el médico de la casa de estudios superiores.

El profesional médico habría recetado unas tabletas de ciprofloxalina y habría recomendado a la estudiante no ir al médico forense, sin embargo, le aconsejó reposo total.

De forma posterior a esta revisión, Quispe soportó los dolores durante dos días sin ser atendida por un especialista oportunamente.

El pasado viernes, en horas de la tarde, el médico habría admitido que el centro médico universitario que administra no cuenta con suficientes medicamentos y le pidió que sea revisada por especialistas ante las dolencias que la aquejaban.

Ante el riesgo de no ser entendida por sus padres por las dolencias que presentaba, incluyendo el sangrado en la orina, la universitaria de tercer semestre de la carrera de Veterinaria, proveniente de Ancoraimes (provincia Omasuyos), decidió quedarse en el domicilio de una de sus amigas ante los constantes dolores de cabeza, cuerpo y heridas visibles como supuesto resultado de tres días de golpes, agresiones y torturas recibidas en contra de su persona.

Ante la gravedad de su estado, tuvo que ser internada en la Clínica Cruz, ubicada en la extranca de Río Seco, donde se mantuvo con prestación médica el sábado y domingo pasados.

Por otra parte, el denunciante aseguró que antes de la despedida de los instructores militares, indicaron que la “golpiza” habría sido por orden de las autoridades de la universidad indígena.

ESTUDIOS

Por otra parte, los estudiantes de la carrera de Medicina Veterinaria y Zootécnica aseguraron a la Red Erbol que no tienen garantías para concluir sus estudios académicos, tras denunciar que el vicerrector, Simar Catari, supuestamente ordenó que los escarmienten en el recinto militar del municipio de Chua porque no están de acuerdo con su nombramiento.

Los indígenas se encuentran casi una semana en la ciudad de La Paz, demandando que los responsables que ordenaron maltratarlos física y psicológicamente en la Unidad del Batallón de Infantería Marina Sexto Independencia, que está en Chua de la provincia Omasuyos, sean sancionados. Además que el convenio sobre cooperación y desarrollo integral con las Fuerzas Armadas (FFAA) quede anulado.

El grupo de estudiantes, de aproximadamente un centenar de personas, no comen ni duermen bien.  Según el relato de Iban Calcina a la Red Erbol, hombres y mujeres, pasan la noche en sillas y el piso del auditorio de la Confederación Sindical Única de Trabajadores Campesinos de Bolivia (Csutcb). Dijo que se cubren con periódicos porque no tienen frazadas. 

El rector de la “U” Aymara, Lucio Choquehuanca, los acusó de ser indisciplinados, de que buscan la autonomía de esa institución y además que sus protestas responden a fines políticos. Calcina, desmintió a la autoridad académica e indicó lo único que quieren es el respeto a sus derechos.

“No tenemos garantías de concluir nuestros estudios. Nos sentimos amedrentados porque no hay caso de reclamar nada en la Universidad, van a sacarnos”, declaró a la Agencia de Noticias Indígenas de Erbol.