Grandes productores de droga

Mi incansable cholita-periodista no descansa ni de día ni de noche y tampoco me deja reposar tranquillo, porque sin respetar mi descanso del guerrero irrumpe en mi domicilio para comunicarme las noticias más importantes que llegan a sus orejas a través de sus computadoras.

Eso sucedió en días pasados cuando la inquieta reportera de pollera irrumpió en mi sagrada e inviolable alcoba nupcial e interrumpió mis castos sueños, sacudiendo mi albo camisón para decirme emocionada “despierte, compadrituy, porque el Gobierno de los Estados Unidos acaba de publicar la lista de los países que más producen droga en el mundo, ¡siendo Bolivia uno de ellos!!!”.

Semejante notición me puso los cabellos de punta y quise alisarlos, pero mi inquieta reportera me ordenó que no me preocupase de mis pelos, porque ella me prestaría sus ruleros.

A continuación, ella me vistió, pasando ambos a mi escritorio para redactar nuestra crónica sobre la base de la importantísima noticia que ya se hallaba dando vueltas por el mundo, dando a conocer que nuestro infortunado país figura entre los mayores productores de droga en el mundo.

La cholita de Quillacollo aún no repuesta de su emoción periodística y de la vergüenza que aquélla le produjera, repetía una y otra vez: “Yo lo sabía, yo lo sabía, pues sólo la droga puede producir la cantidad de dólares que inunda todas nuestras ciudades y pueblos, de norte a sur y de este a oeste”.

Para no quedarme callado y que mi comadre Macacha creyera ser la única poseedora de la cantidad de “pichicata” que se produce en nuestro territorio, le manifesté que hace muchos años se denunció la presencia de “cárteles” extranjeros que se encontraban operando en nuestro territorio, pero los personajes que nos gobiernan negaron esa versión y sostuvieron que no se trataba de cárteles sino de traficantes aislados.

Mi socia periodística que no tiene pelos en la lengua me dijo con su natural atrevimiento: “Todos los llamados a combatir el narcotráfico y a controlar el cultivo de la coca se hicieron los tuertos, los ciegos y los ‘chojñis’ (léase legañosos), nunca se sorprendieron al descubrirse laboratorios dotados de técnicas colombianas, mientras los narcos jamás fueron aprehendidos, sospechándose que eran de nacionalidad peruana, colombiana y brasileña”. Yo también lo sabía, no pude decirle otra cosa que “Amén, cholita, per sécula seculorum, amén, cholita”.

Íbamos a dar por concluido nuestro trabajo periodístico, pero se me ocurrió preguntarle a Macacha: “¿Y qué ha dicho el presidente Evo al saber que Estados Unidos nos ha colocado entre los más mayores productores de droga en el mundo...?”. La cholita cochabambina me respondió: “El Presidente del Estado Plurinacional y Folclórico y dirigente principal de las Siete Federaciones de Cocaleros del Chapare ha rechazado esa designación justa o injusta”.