Indicios de apertura diplomática de Bolivia a Estados Unidos y Chile

Las recientes declaraciones del delegado para la Causa Marítima, Carlos Mesa, respecto a que “Bolivia está dispuesta a dialogar con Chile” y, que las relaciones entre Bolivia y Estados Unidos “tienen que pensarse para el año 2015”, abren en perspectiva un nuevo horizonte a las relaciones internacionales de nuestro país.

El Delegado para la Causa Marítima, que se entrevistó con diplomáticos y personalidades de la Organización de Estados Americanos y de la Organización de Naciones Unidas, mantiene un discurso firme sobre la política marítima boliviana, reiterando que la demanda de nuestro país ante la Corte Internacional de Justicia de La Haya no involucra para nada el contexto del Tratado de 1904, sobre cuyo tema está movilizada la artillería diplomática chilena.

Carlos Mesa, prácticamente ha invitado a Chile a un diálogo. Suponemos que el Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia, al mando de David Choquehuanca, habría considerado que el exmandatario boliviano y periodista, es un portavoz idóneo y escuchado en el concierto de naciones latinoamericanas; de la OEA y la ONU, sin exceptuar a Chile.

Este es un primer indicio, que nos remite a una posible nueva etapa de la Cancillería boliviana, sopesando quizás, la anunciada victoria electoral de Evo Morales y en este supuesto, adelantando lo que podría ser el papel de la futura política internacional del Estado Plurinacional de Bolivia: apertura diplomática de amplitud.

El segundo indicio, pese a los negativos mensajes de militantes del Movimiento Al Socialismo, contra el retorno de la DEA y contra el “imperialismo”, surge también en la voz de Carlos Mesa quien, además de delegado de la Causa Marítima, hace en sí, el de diplomático creíble, pensamos, autorizado por la jerarquía de la Cancillería de Bolivia y lanza la idea de que, las relaciones bilaterales con el Gobierno de Estados Unidos “deben pensarse para el 2015”.

Nuestra tesis de que, la casi segura reelección de Evo Morales en octubre de este año, ya perfila en este caso, motivaciones enfocadas a renovar y también a restablecer relaciones diplomáticas amplias a partir del 2015 con Estados Unidos, estaría confirmada con la exposición del delegado Carlos Mesa Gisbert.

Ambas intervenciones constituyen mensaje elocuente de la voluntad política boliviana, dirigida a un cambio de timón, cuando Evo Morales Ayma inicie su tercer mandato constitucional, tal vez con dos tercios en la Asamblea Legislativa y un poder relativamente absoluto en las instituciones del Estado Plurinacional que, dicho sea de paso, camina tras la indeleble huella de la República de Bolivia. (Clovis Diaz)