Ciudadanos marchan exigiendo se aceleren investigaciones

Familiares de personas desaparecidas y población en general llevaron adelante ayer una marcha de protesta en la que se denunció la falta de resultados en el proceso de investigación de más de 10 casos de ciudadanos extraviados, explicó Martha Ramos, una de las manifestantes.

Bajo estribillos como “¡Somos personas no mercancía!”, los marchistas realizaron su movilización desde el sector norte hacia las puertas de la Felcc donde dieron a conocer que desde hace dos meses ellos se encuentran buscando a sus familiares con la finalidad de poder encontrar o dar con su paradero, mientras la instancia policial no da cuenta del avance de la investigación aduciendo que no tienen los recursos humanos ni logísticos para lograr resultados.

“Estamos desesperados porque mi sobrina Julia Nina tenía que recorrer sólo siete cuadras de su casa a la Universidad Pública de El Alto (UPEA), pero hasta la fecha no existe ningún resultado de donde está su paradero”, indicó Ramos.

Los universitarios de la carrera de Psicología, donde ella estudiaba, al igual que familiares de esta persona desaparecida denunciaron que en el proceso de la investigación ellos deben asumir una serie de gastos que son parte del proceso burocrático, pero de ello no reciben ningún resultado favorable, porque ninguna instancia policial llega a dar cuenta de qué tipo de investigaciones estarían logrando a más de dos meses de haberse formalizado la denuncia, pese a tener varios registros telefónicos y mensajes realizados desde el teléfono celular de la víctima.

Entretanto, familiares dieron a conocer que desde hace dos meses continúan caminando desde Santiago II hasta la Felcc cerca de cinco veces al día, sin conocer ningún avance en la investigación.

En la movilización también se presentaron otras madres de familia quienes dieron a conocer que desde hace tres semanas sus hijas no retornaron a sus domicilios, como es el caso de Cecilia Ventura, de 16 años, que se ausentó de su hogar por un viaje realizado a Cochabamba y hasta la fecha no se logró ningún resultado de su paradero.

“Seguridad, seguridad, seguridad”, eran los estribillos de los familiares quienes protestaron ante las puertas de la Felcc ante la ausencia de resultados en la investigación realizada por funcionarios policiales. Pese a la movilización la entidad policial sólo opto por cerrar sus puertas y no atender la demanda de los familiares y compañeros de estudio de una de las estudiantes desaparecidas de la UPEA.

Por su parte, los universitarios dieron a conocer que ellos viven bajo constante incertidumbre porque la inseguridad ciudadana y la trata de personas ponen en riesgo la vida de adolescentes y mujeres que inician sus actividades de estudio.

AUMENTAN EXTRAVÍOS

Agregado a ello, los padres de familia de siete personas, entre ellos dos varones y cinco mujeres, se presentaron a formalizar las denuncias ante la Felcc en la División de Trata y Tráfico de personas con la finalidad de poder obtener algún resultado, luego de que las mismas salieron de sus hogares y no retornaron hasta la fecha.

Uno de los jóvenes desaparecidos es Bryan Fernández, quien es buscado por su madre desde el momento en que su colegio reportó su inasistencia al establecimiento escolar.

Lizet Fuentes es otra de las adolescentes extraviadas. Los padres de familia de la menor aseguraron que el fin de semana recibió una llamada la atención de parte de sus hermanos ante su bajo rendimiento en el establecimiento escolar, hecho que generó que ella saliera de su hogar en la zona de Ventilla sin retornar hasta la fecha.

“Son siete casos de personas desaparecidas desde los nueve años hasta los 23y uno de los casos de un menor de 15 años se registra por quinta vez la denuncia de desaparecida”, explica el informe policial.