Tras el naufragio de la barcaza de la Armada Boliviana, el comandante de la fuerza naval, vicealmirante Gonzalo Alcón, sostuvo que el trágico hecho en el que perdieron la vida una periodista y un subrigadier, involucraría a más más jefes militares, para el efecto se instruyó una investigación exhaustiva para esclarecer el grado de responsabilidad.
El vicealmirante Alcón manifestó que no sólo esos dos jefes militares de la Armada Boliviana, refiriéndose al Comandante de la Escuela Naval Militar y el Comandante del Remolcador TNR-12, podrían ser investigados.
Explicó que para el efecto tienen diez días para hacer conocer el informe respectivo sobre lo ocurrido en la travesía que se truncó a la altura del kilómetro 1.342, altura del fuerte Coimbra de la Hidrovía Oaraguay-Paraná.
Por otro lado, los cuerpos de la periodista Liliam Ortega Soto y del subrigadier Jesús Rubén Quispe Churata fueron velados por separado en medio de la consternación de sus familiares.