Azkargorta: “Bolivia marcó mi vida”

“Sí, cumplo 61 años, pero me veo al espejo y parezco de 16”, sonrió Francisco Xabier Azkargorta Uriarte, natural de Azpeitía, quien ayer cumplió un año más de vida.

No se sonrojó para nada Azkargorta, un entrenador de rostro serio en el último tiempo, pero con un carisma inigualable y de profundas convicciones.

Azkargorta, tras ser felicitado por los periodistas en Tembladerani, recordó su inicio en el país como entrenador y señaló que “Bolivia está muy marcada en mi vida”.

Azkargorta llegó al país en 1992 para hacerse cargo de la Selección Nacional en las Eliminatorias Sudamericanas al Mundial de Estados Unidos 1994, al que logró clasificar, aunque siempre se quitó méritos porque sobrepuso a los jugadores de aquella época, como los principales protagonistas. “Todo lo que viví en Bolivia marcó mi vida, tanto la clasificación, como el mundial en sí y también ser protagonista del partido inaugural con Alemania en Chicago. Sin olvidarme lo que me pasó en este 2014 con Bolívar, que lo considero también inolvidable”, señaló el técnico. El cumpleaños número 61 no hace que el entrenador español se sienta en la última etapa de su carrera deportiva: “Yo soy entrenador de fútbol, me siento entrenador de fútbol, tengo todavía fuerzas como para seguir trabajando como entrenador de fútbol, que es lo que amo”, aseguró.

El vasco trabajó también en otras áreas del fútbol además de entrenar equipos profesionales de fútbol. Sin embargo, aclaró que dirigir es lo que más le gusta.

“También trabajé en la dirección deportiva, fui director de escuelas de jovenes, periodista en alguna ocasión. Pero lo que más me gusta es entrenar”, sostuvo. Azkargorta recordó en el día de su cumpleaños, sus inicios como entrenador y su carrera, que se desarrolló de manera “contraria” a la tradicional. “La tendencia habitual en el fútbol es que un técnico en sudamérica quiere triunfar aquí para luego ir a entrenar a Europa o España. Y yo vine a sudamérica después de haber entrenado ocho años en la primera división de España. Es decir, fue un poco al contrario”, comentó.

En torno a su segunda llegada a Bolivia, Azkargorta declaró que fue algo “contradictoria: “He sido recibido mucho agradecimiento de bastantes y he sido vapuleado por otros también, y no entiendo mucho, por qué razón sucedió, pero son cosas del fútbol”, señaló el español.

También destacó, en su vuelta, la campaña como entrenador de Bolívar, al que llevó hasta las semifinales de la Copa Libertadores de América, en la pasada gestión. “Fue un momento muy lindo llegar con Bolívar a las semifinales de la Libertadores, con toda esa afición enorme agradeciéndonos. A pesar de haber obtenido un mal resultado en Argentina (perdieron con San Lorenzo 5-0 en el partido de ida de las semifinales), pero luego la afición nos respondió de gran manera”, acotó. El vasco también relievó su unión con la boliviana Aracely Saucedo, que le hizo mucho bien a su vida, según contó ayer. “Por una parte, esta segunda vuelta a Bolivia ha sido muy emocionante para mi, porque me volví a enamorar y eso siempre es importante en la vida”, expresó el técnico, quien guarda un profundo amor por su pareja cruceña.

Ayer, tras el entrenamiento, viajó a Santa Cruz para pasar una tarde bonita acompañado por los amigos y por la noche, algo más íntimo con Saucedo y la familia.

Ronald Jiménez