Vecinos recolectan agua de lluvia

La jefa de grupo del Comité Impulsor de Cultura del Agua, Justina Aruquipa, confirmó que vecinos de varias zonas ubicadas al norte de la urbe alteña recolectan agua de lluvia como mecanismo de cuidado al medioambiente.

De acuerdo con el relato, los vecinos usarían una cañería alterna para esta recolección con el objetivo de destinar el líquido al servicio de higiene y riego de plantas.

“Antes, la primera modalidad de recolección de agua de lluvia se hacía mediante turriles, baldes, pero en la actualidad gracias a los talleres realizados por parte de la Organización no Gubernamental Red Hábitat, se ha logrado realizar la denominada ‘cosecha de agua de lluvia’ mediante tanque, con filtro, que permite utilizar dos cañerías”, detalló a EL DIARIO la entrevistada.

El agua de lluvia es destinada a las diferentes actividades que no están relacionadas para el consumo humano y que por el contrario facilitan, por ejemplo, el servicio higiénico, lavado de ropa o se destina a las plantaciones urbanas en carpas para mejorar los alimentos.

El filtro incluido en el proceso de cosecha de agua de lluvia, permite que la misma no contenga algunos contaminantes de riesgo, quedando el agua sucia en el filtro y permitiendo el uso de esta agua a otras actividades.

Los vecinos de la zona Solidaridad, una de las favorecidas con la implementación de este proyecto, en la actualidad no cuentan con alcantarillado, por lo que el uso de agua reciclada de lluvia permite a los vecinos no depender sólo del agua potable que en temporada seca se reduce en varios distritos alteños.

Habitalia Choque una de las responsables del proceso de capacitación dio a conocer que su sector da a conocer un proceso de educación y capacitación para el mejor uso del agua, con la finalidad de que la misma no sólo sea adecuadamente utilizada, sino que reduzca los factores de contaminación generados tanto en la planta de Puchucollo o el propio lago Titicaca.

“Definir solución a la problemática de agua y que la misma sea destinada de manera adecuada, es la política preventiva con la finalidad de que no surjan los conflictos sociales en nuestros municipios, como consecuencia del manejo de este líquido elemento y la manera de cómo se puede ahorrar el agua”, indicó.

CONFLICTOS

POR AGUA

La Red Hábitat también dio a conocer dos estudios relacionados a la prevención de conflictos por al agua, donde la población es la destinada a mejorar sus hábitos para poder adecuarse a mejorar sus condiciones de vida.

Dicha modalidad incluye la instalación de una tecnología que adecue el uso adecuado de la recolección de agua de lluvia.

Entre las investigaciones presentadas se incluyó a los denominados “carros aguateros” que son atendidos por cisternas, las cuales tienen como fuente de abastecimiento los ríos de San Roque y los posos ubicados en propiedades privadas en Señor de Lagunas, la extranca de Río seco, lugares donde dichas aguas registran un grado de contaminación.

“Las unidades de almacenamiento por ejemplo como son los turriles antes fueron utilizados para el traslado de químicos, por lo tanto el agua que ya tiene un grado de contaminación, más el contenido de estos turriles también registra otra contaminación de las aguas destinadas a las zonas donde no tienen la instalación de agua potable”, explicó un segundo técnico.

En el taller se dio a conocer los procesos de descontaminación de este líquido a través del uso de cloro, los procesos para hacer hervir el agua por el lapso de tres minutos y el filtrado de la misma.

El proceso de capacitación de la mencionada organización permite que los vecinos no sólo tengan un adecuado uso del agua potable, sino que también detecten contaminación en la entrega de agua por cisterna.