Nueva York, 24 oct (EFE).- La primera víctima del virus del ébola diagnosticada en Nueva York se encontraba ayer con condiciones de salud estables y bajo cuidados intensivos, mientras se investigan sus últimas actividades para evitar una extensión de la infección.
Craig Spencer, un médico de 33 años que estuvo varias semanas cuidando a enfermos de ébola en Guinea-Conakry, fue internado el jueves en el hospital Bellevue de Nueva York con síntomas de la enfermedad.
Las autoridades de salud de Nueva York anunciaron que una segunda prueba realizada por los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) confirmó hoy el resultado positivo de ébola que había salido de un examen preliminar hecho por el hospital.
“Nos han confirmado que la prueba de ébola es también positiva. Está confirmado que tenemos un paciente de ébola”, afirmó la comisionada de Salud de Nueva York, Mary Basset, en una rueda de prensa con otras autoridades de la ciudad.
El paciente está estable, aislado, bajo cuidados intensivos, pero aun así puede conversar perfectamente y de hecho habla continuamente por teléfono, según dijeron los responsables de salud.
No quisieron precisar el tipo de tratamiento que está recibiendo, para preservar la privacidad del paciente, y sólo dijeron que “básicamente se le están manteniendo equilibrados sus fluidos”.
El médico infectado informó a las autoridades que usó equipos de protección especial mientras estuvo cuidando enfermos de ébola en Guinea, pero se desconoce cómo, a pesar de ello, se pudo contagiar.