Asesinan y entierran a mujer en su casa

El cuerpo de la propietaria de una vivienda en la zona Cooperativa San Roque fue enterrado en el patio de su casa. Los inquilinos del domicilio encontraron el cuerpo y se presume que el asesino sería su concubino quien falleció hace algunos días a consecuencia de un atropello en la carretera a Copacabana.

De acuerdo con las declaraciones preliminares, se dio a conocer que la mascota de la familia inquilina falleció, razón por la que los niños deciden enterrar al can en el interior de la casa como parte del cariño al animal y cumpliendo una tradición que se manifiesta en muchos hogares alteños.

Sin embargo, cuando procedieron a enterrar el cuerpo de la mascota los ciudadanos encontraron el cadáver de la mujer y al ver huesos y restos de nylon, decidieron buscar el resto de los huesos en el lugar.

“Cuando estábamos cavando nos dimos cuenta de que la tierra no era la misma, parecía que habría sido removida y cuando encontraron huesos, ellos pensaban que se trataba de los restos de otra mascota que fue enterrada el pasado año”, indicó una de las vecinas.

En el proceso de enterrar al animal la vecina y los menores se dan cuenta que había un nylon azul y al interior del mismo se encontraba el cuerpo de la mujer quien aún tenía puesta la ropa de dormir, aspecto que definiría que la misma fue asesinada al interior de su cuarto la noche del 15 de Julio, cuando ella estaba en su cama.

FAMILIA

La hija mayor de la familia de la fallecida afirmó que el padrastro, identificado como Anacleto Mamani de 58 años, en pasados días perdió la vida como consecuencia de un atropello en la carretera a Copacabana, pero que en vida no quiso dar cuenta de la desaparición de la madre de los menores y menos realizar alguna diligencia para poder encontrar a su concubina.

“Mi padrastro era quien decía ha ido al campo tu mamá está en el campo, pero era mentira porque cuando averiguamos ella no había llegado al campo y yo me quedaba solicita con mis hermanitos, porque incluso mis tíos no quería saber de mi mamá”, recordó la adolescente.

Cuando los menores trataban de que alguien les ayude para poder buscar a su madre, el rechazo de los tíos para hacer dicho proceso era constante y se oponían a solicitar ayuda por los medios de comunicación y dar cuenta del extravió.

Pese a que los menores recuerdan que su padrastro supuestamente se mostraba como una persona tranquila, sin tener ninguna inclinación por las bebidas alcohólicas u otros vicios, al parecer desconocen sobre las discusiones y los posibles enfrentamientos generados contra su madre quien tuvo que finalmente enfrentar la muerte en su hogar.

La menor recuerda que alguna vez ella presenció que su padrastro golpeó a su madre pero dicha violencia no era visualizada frecuentemente, por lo que ignoran que ocurría al interior de su propio cuarto.

Ante la única presencia adulta que vivía en su casa y ante el poco interés que presentaba para buscar a su concubina, ahora los tres menores que quedaron huérfanos dan cuenta que el posible responsable de la violencia que acabó con la vida de su madre era su padrastro, quien tampoco pudo quedarse mucho tiempo con vida.

En la zona Cooperativa San Roque sienten preocupación porque la mayor de los tres huérfanos tiene 15 años, el mayor de los varones 11 y el último siete años, quienes al momento no tendrían ningún familiar cercano que se haga cargo de la familia, razón por la que solicitan la presencia de la Defensoría de la Niñez, quien pueda coadyuvar a la orientación de los menores.

De los tres sólo la menor de 15 años, en la actualidad, realiza trabajos en una familia, pero estas tareas podrían ocasionar a que ella no pueda continuar con sus estudios y menos atender el gasto económico de mantener a dos menores más.