Estudiantes protestaron en el centro de la sede de Gobierno en apoyo a las mujeres procesadas.
Docentes y estudiantes de la Universidad Pública de El Alto (UPEA) marcharon ayer hasta la sede de Gobierno demandando la libertad de una residente y otra docente de la carrera de Enfermería implicadas en el procedimiento judicial de la muerte del bebé Alexander, informó la decana del Área de Salud, Soraya Vega.
La movilización se concentró en el Multifuncional de La Ceja de El Alto, desde donde descendió de manera pacífica por la Carretera Naciones Unidas, tomando posteriormente la avenida Kollasuyo y descendió hasta la avenida mariscal Santa Cruz, desde donde los marchistas dieron a conocer su malestar contra las detenciones calificadas de injustas.
“La marcha que está siendo encabezada por las carreras del áreas de salud y sobre todo por enfermería porque entre las personas detenidas nosotros tenemos dos compañeras, una de ellas es docente de la carrera de enfermería y la señorita que es la que estaba realizando sus prácticas”, afirmó.
Los representantes docentes y estudiantes en la movilización dieron a conocer su pedido de que se realice un debido proceso donde se logre científicamente establecer las responsabilidades reales y evitar que se prosiga efectuando detenciones, sólo por presión política.
Los alumnos, mediante estribillos, daban cuenta el apoyo que mantendrán como plantel universitario, “Martha, docente, la UPEA está contigo”, mencionaban los estudiantes mientras que con carteles en mano efectuaban el recorrido por las diferentes calles de ambas ciudades.
Mientras que la estudiante, quien es interna de la carrera de enfermería, en la noche en que se atendió al bebé Alexander sólo estaba bajo las ordenes de la responsable de turno, “por lo que ella no efectuó ninguna atención al menor porque todo el procedimiento lo realizan otras instancias”, remarcó Vega.
En la movilización se incluyó otras carreras, como Comunicación Social, quienes efectuaron su apoyo institucional a quienes en la actualidad deben enfrentar un proceso penal de infanticidio, sin que se defina resultados concretos y sobre todo científicos.
En tanto, en representación de los estudiantes, Guillermo Copa lamentó que los procesos judiciales respondan sólo a presiones políticas y no se establezca con precisión las responsabilidades directas.
“Las personas que han sido detenidas preventivamente son las que no deciden ninguna acción de atención médica, mientras que la directora del Sedeges y las otras instancias están libres, confundiendo a la población con informes irregulares, impidiendo que se obtengan resultados científicos, con pruebas de ADN y no sólo suposiciones o acciones instintivas”, afirmó.
A nivel de los estudiantes, sus representaciones dieron a conocer que se declararon en emergencia y que mantendrán sus movilizaciones mientras sus compañeros continúen siendo procesados sin ningún resultado.
En la actualidad, en el proceso de investigación de la muerte del menor Alexander, se efectuó una autopsia, la detención de seis personas de las cuales, en audiencia de medidas cautelares, se determina la detención sólo de cuatro personas, entre ellas las dos enfermeras.
Posteriormente se logra la toma de declaraciones, la necropsia y la reconstrucción de hechos, manteniéndose el proceso en reserva por parte del Ministerio Público mientras que se defina el careo y la posible participación de profesionales del área forense a nivel internacional, para establecer las causas de la muerte del menor y el tiempo probable en el que éste fue dañado.
Por su parte, la ministra Amanda Dávila anunció que el proceso volverá a foja cero para realizar nuevamente las investigaciones del caso.
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