La música tiene dueño y se debe proteger las obras de sus creadores

La tarea principal que se ha propuesto la Sociedad Boliviana de Autores y Compositores (SOBODAYCOM) es lograr concientizar a la ciudadanía acerca de que el derecho de autor está protegido por la Ley 1.322.

“Es un derecho adquirido desde 1991, cuando se promulgó esta ley. La música tiene dueño, nosotros cobramos los derechos de autor, administramos lo recaudado y luego lo distribuimos (a los beneficiarios), ese es el factor principal de la sociedad”, aseveró Arturo Conde, presidente de SOBODAYCOM, al hacer una evaluación del trabajo que viene realizando esta entidad.

Conde lamentó que todavía existen varios sectores que rehúsan cumplir con esta disposición legal que beneficia a creadores y compositores, estén o no asociados a SOBODAYCOM.

“Hay lugares donde no se paga, como karaokes y discotecas, algunos están pagando, pero no todos”, dijo el también conocido cantante del grupo La Bamba (A), quien está al frente de la institución desde el año 2011.

LG: ¿Como evalúas tu gestión al frente de SOBODAYCOM?

A: Estamos marchando bien, todas las gestiones fueron buenas y en ésta venimos trabajando de manera más estrecha con la dirección general, los comités de vigilancia, el tribunal disciplinario y las directivas departamentales que son importantes.

LG: ¿Cómo un compositor se beneficia con esta ley?

A: La sociedad cobra los derechos de socios y no socios. Un compositor que no es socio debe demostrar que sus temas son de su autoría y esto se puede hacer con una declaración jurada o presentar su registro en el SENAPI, en la dirección de derechos de autor, y luego de ello venir por nuestras oficinas. SOBODAYCOM está trabajando por los asociados y no asociados. Es el caso que hemos tenido en Puno con el maestro Raúl Mamani Choque, que es autor del tema “Abran más cancha”. Ya mandamos una carta exigiendo que no usen esa canción y nos han hecho caso. Raúl no era socio, pero ahora ya lo es. Lo mismo pasó con el tema “Oh Cochabamba querida” de Jaime del Río, que lo cambiaron a “Oh Quillabamba querida”, nosotros hemos tomando cartas en el asunto

LG: ¿Por qué la gente se resiste a pagar los derechos de autor?

A: Se debe simplemente al desconocimiento, no quieren reconocer que hay una ley, la 1.322, que nos faculta para cobrar.

LG: ¿Este dinero va a los compositores?

A: Desde luego, el dinero es para los compositores, la cuestión de los artistas la maneja ABAIEM. Nosotros simplemente estamos protegiendo las obras de los creadores.

LG: ¿Cuál es la hermenéutica?

A: El que está auspiciando un espectáculo debe cancelar por el uso de la música y tener la respectiva autorización. En Bolivia se toca un 90% de música extranjera y el 10% es música nacional en cualquier género y obviamente ese dinero debemos mandarlo al exterior, pero la gente debe pensar que nosotros nos quedamos con el dinero y eso es imposible. Justamente este fin de año vamos a invitar a gente del exterior y le vamos a dar el cheque de lo que recaudamos. Hay que pedir al Estado que se genere una ley por la que radios y canales difundan la música nacional por lo menos en un 50% y así salimos ganando.

LG: ¿Qué harán el 2015?

A: Entregaremos tres bonos mensuales de 500 bolivianos: el bono autor, a quien tenga dos años de antigüedad y cumpla algunos requisitos; el bono meritorio, a gente que ha sido reconocida por su trayectoria y el bono icono, que se entregará uno por departamento. Por ejemplo por Chuquisaca y nadie lo va desmerecer, le entregaremos un bono de por vida a Matilde Casazola.