La décima legión romana

La Décima Legión Equestris (caballería) y la Legión X Gemina (infantería) fue la fuerza de élite creada en Hispania por Julio César en el año 61 a. C. Adquirió fama por el coraje desplegado en los campos de batalla, por su disciplina y organización militar. Tenía por emblema a la figura de un formidable toro. La Décima Legión tuvo en papel crucial en la guerra de las Galias, luchando bajo el mando de Cé-sar en casi todas las batallas.

Cuenta la historia que también participó en el asalto a Masada, fortaleza que parecía inexpugnable, construida por Herodes en la cima de una montaña del desierto de Judea y ocupada por grupos nómadas judías.

La Décima Legión al mando de Julio César participó en la conquista de una buena parte de Francia, Bélgica y Holanda. También emprendió una campaña naval luego terrestre a la isla de Bretaña (hoy Inglaterra) tierra defendida por bravos guerreros.

A lo largo de todas las campañas de Julio César en la Galia jugó un importante papel en su éxito militar y por esta razón se transformó en su legión preferida.

En 49 a. C., la Legión mantuvo su fidelidad a César en su guerra civil contra Pompeyo. En la decisiva Batalla de Farsalia, Pompeyo y sus seguidores fueron aplastados por los legionarios de César. Durante la guerra civil que siguió al asesinato de César, la Legión X siguió a Marco Antonio en Armenia, durante su campaña parta. Durante una guerra civil la legión luchó de parte de Marco Antonio hasta la derrota en la batalla de Accio, después de la cual la legión se pasó al ejército de Octaviano.

Finalmente los veteranos recibieron tierras y se dispersaron por algunas regiones, aunque algunas fracciones siguieron sirviendo a diferentes soberanos. Muchos historiadores militares la consideran como una de las uni-dades romanas de combate más famosas de toda la Historia.

Los legionarios romanos llevaban arma-duras muy pesadas, sus armas consistían en un yelmo de metal para cubrir la cabeza y el rostro. Los oficiales ador-naban con plumas o crines para hacerse reconocer en la bata-lla. Llevaban también corazas de cuero o de metal. El escudo era generalmente convexo y de forma rectangular, hecho de madera y recubierto de fuerte cuero, con bordes de metal. Su arma de ataque consistía en una espada corta de dos filos y una lanza o pica con punta de metal.

Una legión estaba compuesta de 4.200 hombres: 3.000 de infantería pesada y 1.200 de infantería ligera. El número de la legión podía aumentarse según las necesidades.

Los de la caballería usaban armadura simi-lar a la de los legionarios; montaban a caba-llo sin estribos ni montura y tenían que aprender a desmontar completamente arma-dos, destreza adquirida tras agotadores ejer-cicios.