La Habana.- Cuba y Estados Unidos iniciaron ayer sus primeras conversaciones oficiales en La Habana tras el anuncio de su deshielo diplomático con una reunión centrada en temas migratorios y que transcurrió, pese a algunas discrepancias, bajo un clima “constructivo” y de “respeto”, según ambas partes.
“La naturaleza productiva y de colaboración de las conversaciones de ayer prueba que, pese a que persisten claras diferencias, se pueden encontrar oportunidades para avanzar en intereses mutuos”, indicó en rueda de prensa el subsecretario adjunto para Latinoamérica, Alex Lee, que encabezó la delegación estadounidense, informó Efe.
Su contraparte cubana, la directora para EEUU del Ministerio de Relaciones Exteriores (Minrex) de la isla, Josefina Vidal, también destacó el “diálogo fluido” y el “espíritu constructivo” de los contactos de ayer, aunque salieron a relucir viejas diferencias entre las partes en materia migratoria.
“Cuba aspira a una relación normal con Estados Unidos, en sentido amplio”, reiteró Vidal, que volverá a liderar hoy la delegación cubana que debatirá con los negociadores estadounidenses la hoja de ruta de la normalización de lazos diplomáticos.
Del lado estadounidense será la secretaria de Estado para Latinoamérica, Roberta Jacobson, quien encabezará ese encuentro, en el que abordarán la reapertura de sus respectivas embajadas en Washington y La Habana, cerradas en 1961 cuando rompieron sus relaciones diplomáticas.