Plaza Murillo se vistió de colores

Banderas con la tricolor boliviana, wiphalas, alfombras esponjadas y una suerte de atuendos autóctonos, túnicas, polleras, turbantes, sombreros, cascos de mineros, además de cuadros de protomártires de la independencia, bandas militares y música folklórica junto a parlantes y pututus fue el escenario externo de la plaza Murillo donde se llevó a cabo la posesión de Evo Morales para su tercer mandato constitucional.

El movimiento inició desde la madrugada de ayer cuando obreros y servidores públicos hacían pruebas de sonido, tendían las alfombras rojas frente a Palacio de Gobierno y el edificio del Congreso.

Los actos centrales dieron inicio al promediar las 10 horas con el inicio de la sesión congresal en el Legislativo y la lectura de la ley para posesionar a Evo Morales y Álvaro García en su tercer mandato.

Pero, previo a la sesión, los asambleístas oficialistas realizaron a las 9.00 horas un desfile desde el Prado paceño hasta la plaza Murillo, esta marcha cívica cortó todo el acceso al centro de la ciudad.

No había paso para movilidades desde la avenida Simón Bolívar, todos los accesos al kilómetro cero y a las avenidas 16 de Julio y Mariscal Santa Cruz estaban cerradas, causando un tráfico imposible de lidiar en las zonas cercanas como San Pedro, Sopocachi y Miraflores.

Sin embargo, el panorama en la plaza Murillo era distinto, todos los actores, desde las organizaciones sociales que llevaron a su policía sindical -cholitas con wiphalas y mineros con la tricolor – resguardaron todo el espacio alfombrado entre Palacio y Parlamento.

Entre los actos de protocolo destacaron algunos aspectos novedosos como la delegación de organizaciones sociales que fue a Palacio a recoger de manos de Morales la medalla y la banda presidencial que llevaron en dos urnas hasta el Legislativo donde la sesión ya había iniciado. Lo mismo aconteció con los símbolos que carga el Vicepresidente.

García Linera llegó al Parlamento acompañado de su esposa y su comitiva que ingresó bajo los compases de una marcha militar hasta el Congreso.

Tras él y antes de su llegada fueron arribando las distintas delegaciones oficiales. Todas ellas eran recibidas con música marcial y la marcha presidencial en el caso de los mandatarios que acompañaron a Morales.

Se instalaron distintos palcos frente a ambos palacios para que las autoridades e invitados aprecien el desfile cívico militar después de los actos centrales.

Sin embargo, uno de los palcos estaba ocupado por un grupo de niñas, en su mayoría. Todas ellas estaban entre los 11 a 14 años y eran oriundas del trópico de Cochabamba. Relataron que formaban parte de equipos de fútbol femeninos.

Esas niñas, al igual que los periodistas, fotógrafos y camarógrafos, junto a la población que se dio cita, siguieron atentas la llegada de los invitados, el Vicepresidente y finalmente el Presidente de Bolivia que fue recogido y escoltado de Palacio por una delegación de Parlamentarios.

Tras la posesión, la entonación del Himno Nacional, los actos se trasladaron hasta Palacio donde llegó Evo Morales y tras suyo sus invitados para para la fotografía oficial.

Luego, se inició el desfile cívico militar y paulatinamente los mandatarios invitados fueron abandonando el lugar.

En horas de la noche se llevaron a cabo dos actividades: la cena de gala que el Presidente ofreció a sus allegados e invitados y el festejo popular en el estadio Hernando Siles. (Yolanda Mamani Cayo yolyta4@gmail.com).