Miscelánea

El tragaespadas más famoso de todos los tiempos fue el francés Chevalier Clicquot, cuyas hazañas asombran al público de entonces, (fines del siglo XIX). Como su esófago era tres veces más ancho que el de un hombre normal, pudo “tragar” catorce espadas a la vez.

Durante Edad Media, era costumbre que el condenado a muerte diera una propina al verdugo al subir al cadalso, a fin de obtener una ejecución “buena, rápida, que no le cause sufrimientos”.

Durante la guerra de Secesión, el ejército de los Estados Unidos poseía un cuerpo regular de camelleros para realizar patrullaje sobre las desérticas fronteras de California con México.

Bellezas de la antigua Grecia. La más famosa fue Aspasia, la amante del noble Pericles. Tiempo después vino Friné, que posó desnuda como modelo del escultor Praxiteles y el pintor Apeles. Sirvió como modelo de Afrodita la diosa del amor, porque se suponía que su cuerpo era más bello que los de todas las demás mujeres.