10 de febrero de 1837
Este día de 1837 fallece en la ciudad rusa de San Petersburgo por las heridas recibidas en un duelo instigado por sus enemigos, el escritor Alexander Sergeyevich Pushkin quien se ha alzado por su maestría literaria sobre todos los otros poetas rusos, está considerado el fundador de la literatura moderna rusa.
Debido a su origen aristocrático, recibió una educación basada en la lengua y literatura francesa, que influyó notablemente en su poesía, pero con el tiempo se acercó cada vez más a los cuentos y formas populares, de ahí que escribiera en ruso. Fue pionero en el uso de la lengua vernácula en sus obras, creando un estilo narrativo “mezcla de drama, romance y sátira” que fue desde entonces asociado a la literatura rusa e influyó notablemente en posteriores figuras literarias.
Poseía un genio universal, reformó el lenguaje literario rompiendo con la tradición del siglo XVIII; escribió consumados poemas líricos y épicos (Poltava, El jine-te de bronce, Eugenio Oneguin); potentes obras dramáticas en versos (Boris Godunov, Pequeñas tragedias); prosa brillante (Cuentos del difunto Iván Petróvich Belkin, La dama de picas, La hija del capitán, Dubrovski); cuentos en verso (Ruslán y Liudmila, Cuento del zar Saltán, Cuento de la princesa muerta y los siete caballeros).
Su estilo, a medio camino entre el realismo, la sátira y el drama, se aleja del romanticismo de su juventud y se vuelca cada vez más en la narrativa popular. Pushkin se convirtió en la figura central de la poesía rusa del siglo XIX eclipsando a otros poetas, talentos que en otras circunstancias podrían haber sido el honor de cualquier literatura nacional.
Fundó la revista El Contemporáneo, que llegó a ser la publicación más influ-yente de las letras rusas. Fue un notorio liberal, sobre todo en sus años más jóvenes, y conoció la censura y el destierro, mimetiza sin embargo en su vida y en su obra los rituales de la clase aristocrática a la que pertenecía: la corte como lugar donde el hombre alcanza su dimensión trascendente, la belleza femenina como valor esencial, el honor y la fidelidad como retos cotidianos y el duelo como final casi inevitable. Su obra se basa a veces para sus narraciones en episodios de la historia rusa y llega a situar alguna de ellas en los escenarios del Cáucaso que conoció en su destierro, pero se siente atraído sobre todo por los ambien-tes señoriales y aristocráticos de la sociedad en la que vivía. Nació en la ciudad de Moscú el 6 de junio de 1799.
ARGENPRESS
Portada de HOY |
1 Dólar: | 6.96 Bs. |
1 Euro: | 7.77 Bs. |
1 UFV: | 2.02436 Bs. |
Impunidad |