Internos en huelga por falta de agua

El representante del Defensor del Pueblo en El Alto, José Luis Hidalgo, confirmó que internos del penal de máxima seguridad de Chonchocoro se encuentran en huelga de hambre debido a la falta de agua, por lo que actualmente se ven obligados a consumir el líquido extraído de pozos en condiciones infrahumanas.

Hace 10 días, esta instancia solicitó a la directora de Régimen Penitenciario, Jaqueline Murguía, atender las necesidades básicas de los reclusos, sin embargo, hasta la fecha no se habría respondido la petición.

Los privados de libertad solicitaron la pronta intervención del Defensor del Pueblo ante la inacción de los funcionarios de Régimen Penitenciario, factor que obliga a que más de 193 internos de este penal opten por el ayuno voluntario desde el pasado lunes en protesta al no poder ser atendidos.

El principal factor, de acuerdo con Hidalgo, es que el penal de Chonchocoro no tiene servicio de agua potable, factor que obliga a los internos y a la propia instancia policial que resguarda el lugar a desviar los pozos de agua potable que son de uso de las comunidades aledañas, pero el líquido registra características de estar contaminada y ser insalubre, además, el abastecimiento no es suficiente para la alimentación y el aseo de más de 193 internos, además de funcionarios policiales que están al interior de este centro penitenciario.

“Si bien existían dos problemas, el servicio de agua y el suministro de gas licuado para lograr la atención alimentaria, en la tarde de ayer se evidenció un tercer problema que se refiere a la falta de un panel solar, el mismo que dificulta el servicio de energía eléctrica en los motores y por lo tanto la falta del bombeo de agua desde los pozos de donde obtienen este líquido elemento”, indicó Hidalgo.

Una reunión desarrollada en el centro penitenciario de máxima seguridad, entre la instancia de Régimen Penitenciario el Defensor del Pueblo y los representantes de los 193 internos, logró que se solicitara el envío del panel solar para su correspondiente arreglo y que se demandara la presencia de las autoridades de servicios eléctricos con la finalidad de poder atender dicho servicio y el funcionamiento de las bombas de agua, con lo que podría mejorar la atención de las necesidades básicas de los privados de libertad, servicio que lamentablemente, de acuerdo con Hidalgo, no sería inmediato.

En la reunión, los internos, a tiempo de confirmar su estado de emergencia y medida de presión, además de dar a conocer los riesgos, ante la falta de agua potable que dificulta su alimentación correspondiente, el aseo de los internos, sino se agrava al no tener prestaciones médicas inmediatas.

“Desde fines de enero se realizó la verificación junto con los internos constatando de que la cantidad de agua potable en Chonchocoro es insuficiente que no alcanza ni siquiera para poder vaciar los inodoros. Por lo tanto, el acarreo de agua de los internos se da de manera personal, en lo que puedan, baldes, bañadores, jarras, para poder hacer un aseo mínimo, pero no suficiente, ocasionando focos de infección de alto riesgo. Quedando totalmente relegadas por ejemplo el lavado de ropa y aseo completo de los internos, aspecto que vulnera sus derechos humanos de los internos”, explicó.

Pese a las explicaciones realizadas por parte de los internos y además identificar tres factores no atendidos como, energía eléctrica para el bombeo de agua, falta de agua potable y una falta de distribución de Gas Licuado de Petróleo (GLP), las atenciones de Gobierno no serían de manera inmediata, por lo que los reos deberán combatir contra estas necesidades un tiempo más.