Anfibios disecados son utilizados como adorno

Muchos animales que sólo existen en Bolivia están siendo eliminados sin que se considere su adecuada conservación. Es así que EL DIARIO buscó la opinión de la especialista en anfibios, la bióloga María Esther Pérez, para que dé a conocer su punto de vista sobre este tema que surgió a partir del decomiso de varias especies de anfibios en la feria de la Alasita.

EL DIARIO (ED).- ¿QUÉ OPINIÓN TIENE SOBRE EL DECOMISO DE ANFIBIOS EN LA FERIA, POR EL MINISTERIO DE MEDIO AMBIENTE Y AGUA?

María Esther Pérez (MEP).- El decomiso de anfibios, en inmediaciones de la feria de la Alasita, por parte de la autoridad ambiental*, crea precedente, aunque considero es insuficiente frente al problema de conservación que enfrentan actualmente los anfibios de nuestro país.

La ignorancia generalizada y sobre todo ese sentimiento de temor y repulsión hacia las ranas y sapos, hace que algunas de nuestras culturas no se preocupen por su existencia.

Precisamente al encontrar estos animales disecados en una de las ferias tradicionales más importante de la ciudad de La Paz es una muestra de la importancia cultural de estos animales (dicen que atrae el dinero y la buena suerte).

Cuando ya no encuentran a los sapos que antes eran comunes en el Valle de La Paz, las extraerán de sitios más alejados, como ya lo hacen desde hace años, reemplazándolas con especies como el sapo de la caña (Rhinella marina) proviene de tierras bajas. El sapo de la caña es una especie más grande e intimidante. Obviamente alcanza un precio mucho más elevado en la feria.

ED.- ¿QUÉ DICEN LAS LEYES AL RESPECTO?

MEP.- Hace falta informarnos sobre nuestros derechos y obligaciones como ciudadanos, y es importante que el Estado también asuma su rol, el de hacer cumplir las leyes. En el caso específico sobre la extracción de animales de la vida silvestre, la nueva Constitución Política del Estado menciona que uno de nuestros deberes, de los bolivianos, es resguardar, defender y proteger los recursos naturales (flora, fauna) así como el ambiente donde se desarrollan. La Ley del Medio Ambiente (Ley 1333), todavía vigente, toca muchos aspectos relacionados a la conservación. En el caso de flora y fauna silvestre está escrito que el Estado y la sociedad deben velar por la protección de los recursos naturales y claramente define como delito a la captura y/o comercialización de productos de la caza de animales o derivados, sin autorización (sobre todo para aquellas que están en peligro de extinción). El que infringiera esta ley debería ser privado de libertad o deberá pagar una multa.

ED.- ¿ALGUNA ALTERNATIVA PARA MANTENER NUESTROS USOS Y COSTUMBRES?

MEP.- Si bien la gente que las comercializan lo hace por necesidad de ganar dinero podrían continuar con su actividad siguiendo las normas. Así mantenemos nuestras tradiciones, conscientes que no estamos causando daño a una determinada especie de animal o planta o su medio. La autoridad ambiental es la que debe autorizar la venta de animales silvestres siempre y cuando provengan de criaderos destinados al aprovechamiento, que no sean especies en peligro, como la rana del lago. Hay reglamentos que tratan de este tema de aprovechamiento en particular.

Es importante tener conciencia y conocimiento ambiental, veo que hay algo de esto en las escuelas y colegios pero hay que llegar a más sectores de la sociedad.

ED.- ¿QUÉ ESPECIES SON LAS QUE SE COMERCIALIZAN EN LA FERIA. CUÁLES SON SUS CARACTERÍSTICAS Y EL USO DE LAS MISMAS?

MEP.- La especie más frecuente observada en la feria de Alasit, es el sapo común espinoso (Rhinella spinulosa). Es una especie ampliamente distribuida en los Andes, que está compartido entre entre Argentina, Chile, Perú y Bolivia, principalmente en el altiplano. Este sapo puede encontrarse desde el nivel del mar hasta los 5000 m, es más común en zonas altas y según la Lista Roja de Especies Amenazadas del Mundo se encuentra en la categoría de Preocupación Menor, ya que donde está presente es abundante, pero puede presentar extinciones locales. Estas extinciones localizadas es un ejemplo de lo que pasa en el valle de La Paz, donde hace décadas podía encontrarse en jardines, alcantarillas, canales, parques, charcos temporales, arroyos, entre otros, pero debido al crecimiento urbano las manchas naturales que les proveía de ambientes adecuados para reproducirse ya no existen. Aún se la puede encontrar en algunos sitios pero es rara. Otro uso que antiguamente se le daba era su empleo para disecciones en colegios y universidades, pero espero que ya no se hagan puesto que se pueden reemplazar con modelos.

La otra especie que también se la comercializa en la feria es Telmatobius culeus. Esta especie conocida como la rana gigante del lago Titicaca se ubica en una de las categorías más altas de amenaza en nuestro país. Es una especie endémica, única por sus características de vivir en un medio completamente acuático de condiciones extremas. Por lo que pude estudiar, esta rana es más fácil de encontrar en el sector boliviano del lago Titicaca, donde todavía se pueden encontrar especímenes que fácilmente alcanzan los 14 cm de largo del cuerpo. Estiradas los ejemplares más grandes en los 70 podían llegar al medio metro. Pero ya no se encuentran tan grandes.

La rana del lago está amenazada no sólo por la contaminación de su hábitat enfermedades, entre otras.

En el caso de la extracción para la venta de sus ancas se suma la venta de los famosos “licuados de rana”. Para hacer estos licuados o jugos de rana, ponen el animal con todo y tripas (menos la piel), agregan maca y alguna bebida para darle sabor. A este jugo de rana le atribuyen propiedades afrodisiacas. Aunque, no existe prueba científica de que la rana sea la energizante, en todo caso podría ser la maca. En el Perú, encontraron Salmonella en estos jugos. Lamentablemente, tanto el consumo de las ancas como el consumo del jugo de rana son costumbres traídas del Perú. La venta de los jugos ha sido reportada en la ciudad de El Alto.

Un plato de ancas de rana tiene un costo mayor que por ejemplo una comida con trucha o pejerrey, pero matan al menos cuatro o más ranas. Lo peor de todo es que el que consume no sabe (peor si sabe) es que está consumiendo una especie en peligro de extinguirse.

ED.- ¿CUÁL ES LA IMPORTANCIA DE LOS ANFIBIOS?

MEP.- Los anfibios brindan varios servicios ambientales, por ejemplo: son una fuente de alimento para algunas sociedades humanas, especialmente en el sudeste asiático. Por décadas se han vendido las ancas de rana en restaurantes ubicados a orillas del lago Titicaca, y es un plato atractivo tanto para turistas locales como del exterior. Pero este uso ha aportado para la declinación de su población.

Por otro lado, los sapos y ranas sirven como modelos en la investigación médica y ofrecen potencial para nuevos productos farmacéuticos tales como analgésicos y medicamentos antivirales derivados de secreciones de la piel. Son predadores de insectos y otros artrópodos, por tanto contribuyen a la regulación de los servicios ambientales mediante la reducción de mosquitos de humedales efímeros y potencialmente ayudan en el control de otras especies consideradas plagas. Por sus características biológicas pueden consumir una enorme cantidad de insectos nocivos para la agricultura o aquellos portadores de enfermedades como dengue y la malaria.