Predicciones para marzo

Esta mañana muy temprano me despertó mi colaboradora periodística anunciándome la llegada del mes de marzo. Con mis ojos todavía “chojñis” (léase legañosos) llevé mis manos al bolsillo de mi pijama y dije a mi despertadora que le pagaría en horas de oficina, como lo hacemos los caballeros.

A las dos horas de tal hecho, recibí a la cholita en mi escritorio para manifestarle que todavía no tuve tiempo para acudir al banco y extraer las sumas necesarias que me permitirían cumplir con mis obligaciones mensuales, lo cual comprendió la prestamista al decirme: “ya me estará usted pagando, caballero, como lo hace todos los meses.”

Puestos a trabajar, mi reportera me anunció frotándose las manos que este mes de marzo se producirían grandes hechos noticiosos por lo cual ella y yo deberíamos vivir siempre alertas, con los ojos abiertos, las orejas extendidas y la mente siempre despierta.

Tratando de ordenarnos un poco, pregunté a la periodista con polleras si durante este mes serían decapitados en plaza pública los culpables de la desaparición de millones de pesos bolivianos del Fondo Indígena, palabras que provocaron el “ja, ja, jay cholita” de mi reportera, quien me anticipó que me defraudaría al anunciarme que no habrá ninguna decapitación de los culpables, pues se probará que todos ellos son honrados militantes del partido gobernante.

Quedé atónito y patidifuso ante ese adelanto noticioso y tartamudeando pregunté a mi colega polleruda alegando que tales hechos delictivos habían sido denunciados por el Contralor General de la República, reiterándome Macacha: “No pasará nada, compadrituy, y la ministra Achacollo será vitoreada en las cámaras legislativas”. Apesadumbrado ante la mala noticia, pregunté a Macacha qué otros sucesos periodísticos nos depararían “los idus de Marzo”.

Macacha cambió de voz, se sujetó las polleras para que no se le caigan y me dijo con voz resuelta y convencida: “En este glorioso mes de marzo se realizarán las elecciones menores en todo el territorio nacional, mediante las cuales millones de bolivianos elegiremos gobernadores departamentales, alcaldes, concejales y asambleístas locales, un evento que ocupará la atención de toda la ciudadanía durante el mes”.

Estuve a punto de decirle a mi pariente espiritual que ella tendría que trabajar mucho para seguir de cerca esa actuación popular, pero ella volvió a reírse de mis deducciones y me dijo con su estilo “hualaycho” (léase travieso) “ja, ja, jay, compadrituy, cuándo dejará usted de ser tan gil y tan otario… En el último decenio, ¿ha visto usted perder alguna vez al Evo Morales…? No sea usted pues tan gil, mi jefecito. En el mes de marzo todos haremos de actores en el Gran Teatro de las Elecciones. Morales es como Jalisco y Jalisco nunca pierde, y cuando pierde arrebata”.

Este es el panorama musical y político del mes de marzo que hoy comienza.