El DS 21.060 versión 2015

El Dr. Víctor Paz a su llegada al palacio en 1985 pagó las consecuencias del gobierno del Dr. Hernán Siles de la UDP, quien gobernó con principios opuestos al modelo liberal que campeaba en el mundo. Muy contrario a las sugerencias de organismos financieros internacionales y sin escuchar el clamor del pueblo que pasaba por malos momentos, el gobierno del Dr. Siles recurrió a la emisión monetaria y la inflación desangraba la economía del país. El crecimiento del narcotráfico sin control de parte del Estado aumentaba la masa monetaria inflacionaria hasta niveles históricos nunca vistos.

Luego de su salida casi forzada, llegó el DS 21.060 con principios clásicos de una economía capitalista: levantar subvenciones a los hidrocarburos, suspender bonos, relocalización, despido y libre contratación de trabajadores, reducción del gasto público, estabilización de la moneda. Y fue Mr. Jeffrey Sachs quien trajo el decreto para su promulgación: “La Patria se nos muere” fue el justificativo para la aceptación de las traumáticas medidas económicas. Posteriormente llegó la Ley 1.008 ante el continuo crecimiento de la economía ilegal que nos ponía frente a una sociedad mundial cada vez más democrática.

Después de 30 años, las condiciones son similares a las de antes del DS 21.060 de 1985: Subvención a los hidrocarburos, aumento del gasto público, bonos, mayor contratación de trabajadores estatales. El aumento del narcotráfico es visible y no podemos “tapar el sol con un dedo”, como se dice. Paradójicamente, vemos que la inflación no existe o que apenas se inicia, esto porque el Estado se encarga de “recoger el dinero excedente” por medio de altos intereses bancarios y de los impuestos que pagamos por el alto consumo, porque existe circulante en abundancia. Este el contexto.

Pues bien, a partir del anuncio del restablecimiento de relaciones de Cuba con EEUU las cosas han cambiado rápida y diametralmente, al extremo de que el Gobierno boliviano ha pedido a Mr. Barack Obama lo mismo. Por lo que y ante la inminencia del arribo del nuevo embajador de EEUU, un conocido diputado oficialista se adelantó en señalar su aceptación y más o menos que “debe haber respeto mutuo y que no se obligue tomar medidas económicas”. Según el oficialismo, los organismos financieros norteamericanos no deben entrometerse en el manejo de la economía del país porque somos soberanos, y con el Modelo Económico Social Comunitario Productivo marchamos muy bien y estamos blindados ante cualquier cambio económico brusco.

Mr. Nelson Rackefeller dijo que se debe cambiar de negocio en el mejor momento que pasa una empresa y no cuando ésta se encuentra en crisis, lo que nos lleva a pensar que el actual auge económico debe ser bien aprovechado en beneficio del pueblo y los mismos gobernantes.

El temor de la población por la caída del precio del petróleo indexado al precio del gas que exportamos, más la caída del precio de los minerales, por los anuncios oficialistas y de la oposición, es que el nuevo embajador podría entregar al presidente Evo Morales el aún vigente DS 21.060 en la versión 2.015 para su puesta en marcha, que más o menos contendría: la suspensión de la subvención a los hidrocarburos, el recorte de bonos, el recorte del gasto público, devaluación de la moneda, el despido de trabajadores estatales. Por los anuncios en la prensa nos enteramos que diariamente se incauta cientos y a veces miles de kilos de cocaína y marihuana, lo que también nos lleva a pensar que el narcotráfico ha crecido de manera alarmante y desmesurada, lo que obligaría al Gobierno a endurecer la Ley 1.008 en versión 2015, que ocasionaría el retiro de millones de dólares de la circulación en las calles y que son la causa de una futura inflación.

Dependerá del gobierno del Movimiento Al Socialismo si se aplica o no las medidas que posiblemente nos sugieran. Mientras tanto, la incertidumbre y miedo de la población es producto del anuncio de oficialistas y opositores que no escatiman la oportunidad de hablar ante los medios de comunicación.

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