La hora de los “partidos chicos”

Anular la personería jurídica regional de Unidad Demócrata en Beni genera un fenómeno político coyuntural sino insospechado, por lo menos anormal antes de los comicios del 29 de marzo próximo.

En el tema de tan intrincado veredicto, el Tribunal Supremo Electoral cumplió la norma jurídica pero es inobjetable que carga sobre sus hombros con o sin razón, cierto descrédito que mella su imagen institucional.

Dejando el análisis sobre el TSE para los grupos involucrados o que supuestamente ignoraron la ley, interesa a la opinión pública la recomposición política del espacio electoral en el departamento de Beni.

PARTIDOS CHICOS

Es cierto que, en Beni, hay un vacío de poder: a).- UD no existe y los candidatos y militantes de esta alianza carecen de sigla que les permita cumplir sus objetivos; b).- La debilidad política obliga a que los candidatos sin sigla busquen una respuesta de extrema emergencia que no tiene muchas alternativas y ellas son: cobijarse bajo las siglas del Movimiento Nacionalista Revolucionario (MNR), o de la agrupación Nacer.

Sin embargo, no es nada fácil para los miembros de Unidad Demócrata negociar entre la espada y la pared pues; c).- El aliado de última hora tiene la sartén por el mango y por lo tanto, un efímero poder dado por las actuales circunstancias; d).- Este poder suplanta en sí cualquier otro factor relacionado con la correlación de fuerzas y transforma al partido chico, en el categórico papel de definir la “muerte o la vida política” de los candidatos inscritos en la anulada UD beniana.

Por lo tanto, el partido chico o la agrupación pequeña agiganta su influencia política y; e).- Plantea exigencias perentorias, abultadas: direcciones en la cúpula de la Gobernación, en las asambleas y en los principales cargos municipales que apetecía la UD beniana.

El partido chico aprovecha en consecuencia al máximo esta circunstancia, además, con el objeto de “crecer”, lo que en buena moneda se traduce por cargos de todo tipo en la administración regional si ganan los candidatos que suplantan la sigla de la UD

Este fenómeno dialéctico, de transformar a un grupo político de reducidas expectativas antes del colapso de la UD beniana, en un verdadero árbitro del voto en los comicios del próximo 29 de marzo nos muestra que a la hora de las verdades y de las emergencias hay que salvar, como sea, tan terrible paso.

Queda por conocer, cuál es el sentimiento de los candidatos y militantes de la alianza UD beniana. Estamos seguros que además de frustraciones, tal vez recojan menos de lo que esperaban y ello, sería motivo de gran descontento y tal vez, de renovadas luchas internas.

Bajo estas características se moviliza el Movimiento Al Socialismo, en el Beni. Los resultados hablarán el domingo 29 de marzo. (Clovis Díaz) (clovisdiazf@gmail.com).