Sigla ajena y problemas de coyuntura

Los recientes sucesos legales y políticos cambiaron en horas el escenario electoral boliviano y particularmente del Beni, a raíz de una inhabilitación de 228 candidatos a la Gobernación y municipalidades, surgiendo un problema inusual marcado por el cambio de sigla y el ingreso de postulantes no conocidos al electorado beniano.

Un senado de la oposición parlamentaria alertó sobre la caótica situación que se avecinaría en este oriental territorio, después que el Tribunal Supremo Electoral (TSE) anulara la personería jurídica a la que representaba el principal candidato a la Gobernación beniana.

El político dijo que su partido solicitaría al TSE, la postergación de las elecciones en el Beni y agregó: “Es difícil llegar a todos, porque acaba el plazo para realizar campaña electoral y todo el equipo está tratando de llegar a la mayor cantidad de pobladores, explicándole la alianza que han hecho, el nuevo candidato que están postulando pero lo lógico sería que esta elección se postergue por lo menos dos semanas para que las papeletas se vuelvan a imprimir y se pueda informar adecuadamente a la ciudadanía”. El TSE ya dio su veredicto: las elecciones en el Beni no serán postergadas.

PROBLEMAS DE COYUNTURA

El cambio de sigla y el numeroso plantel de nuevos candidatos han colocado a los aspirantes inhabilitados, al borde de la desesperación. Primero porque el TSE no accedió a postergar el proceso de los comicios y segundo, porque la suplantación de candidatos y muchos de ellos desconocidos trae consigo la novedad de los postulantes de último momento pero, en cambio no moviliza tendencias del voto a su favor.

Otro problema es el cortísimo tiempo que ya se extingue, impidiendo que la propaganda política no llegue a explicar el porqué de la nueva sigla y de los candidatos ajenos a una población conocedora de los “antiguos postulantes” pero que ignora tal vez, los sucesos recientes.

El factor tiempo, cortísimo para difundir el cambio de sigla entre militantes, nuevos aliados, simpatizantes y convencer a un buen número de indecisos es un factor determinante ahora y en cualquier proceso electoral.

En consecuencia, el tiempo influiría negativamente en la organización y readecuación de fuerzas y exigirá esfuerzo extra de trabajo a los candidatos suplentes. El caluroso trato personal de tú a tú, de ninguna manera podría ser reemplazado por los medios de comunicación.

Otro condicionante, esta vez físico, atenta contra la campaña: es imposible que en horas, ésta llegue con explicaciones a los más recónditos lugares benianos, surcados por extensas praderas, por bosques y grandes ríos que, para transitarlos necesitan tiempo y tranquilidad.

Tal vez, la confusión tanto por las papeletas de sufragio, como por el cambio inusual de postulantes y el desconocimiento de lo que éstos ofertan en sus programas de gobierno precipite mayor caos en los comicios del próximo 29 de marzo.

También es posible que, ante estas circunstancias de tiempo y espacio surjan otros inconvenientes: los reemplazantes de los 228 candidatos inhabilitados responden en gran mayoría a la citada agrupación ciudadana que puede o no cumplir, llegado el momento, las condiciones del pacto.

Para consuelo, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) pidió al Estado Plurinacional de Bolivia, documentación relativa a la inhabilitación de 228 candidatos, en un plazo hasta las 15 horas de ayer miércoles y punto.

Por tales razones, se espera que hoy jueves 26, tres días antes de los comicios electorales, exista una solución inteligente de la oposición.

El 29 de marzo hablarán los resultados de este crucial panorama en el Beni, mientras que en algunos departamentos, tal vez, continuemos en este seguimiento político hasta el domingo 3 de mayo de 2015,es decir, si es que hay una segunda vuelta electoral.