El Premio a la Cultura que anualmente otorga el Club de La Paz a personalidades bolivianas esta vez fue para Armando Baptista Gumucio, por su invalorable contribución a la cultura.
El presidente del Club, Álvaro Riveros Tejada, fue el encargado de entregar la presea, a tiempo de referirse al galardonado como ´caro Mago´, que consagró su exuberante obra literaria y periodística a los campos del ensayo, la Pedagogía, la Historia, la Biografía, la Antología y el Periodismo, haciéndolo acreedor a las más importantes condecoraciones.
"En este templo de la paceñidad, declarado hace poco patrimonio arquitectónico de la ciudad en su máxima categoría por la Honorable Alcaldía de La Paz, queremos guardar el legado de sus fundadores, que fue el de ponerlo al servicio de todas las manifestaciones que encarnen la cultura. De ahí que emerge este significativo acto, de conferir anualmente la medalla del Club de La Paz, a las perso-nalidades que más se hayan destacado en este campo.
Una sociedad que no rinda justo reconocimiento a sus triunfadores está condenada al fracaso y a la postergación. Aún más, en un mundo polarizado, donde vemos con espanto el surgimiento de movimientos fundamentalistas que a plan de martillo, tratan de destruir 4000 años de su propia cultura", dijo el titular del Club, en partes de su discurso.
La ceremonia se cumplió en el salón Centenario del Club, donde se concentraron intelectuales de diversos ámbitos para sumarse al homenaje del notable boliviano.