Unas 600 personas mueren al año por falta de atención

Los datos a nivel nacional sobre enfermos renales señalan que cerca de 600 personas mueren cada año por problemas de riñón. Las ciudades con mayor incidencia de enfermos son La Paz, Santa Cruz y Cochabamba, informó ayer el defensor del Pueblo, Rolando Villena.

Esta institución elaboró un informe oficial de la situación real de los enfermos renales, en el entendido de que existen muchas falencias en el servicio que prestan las unidades de hemodiálisis, tanto en hospitales de la Seguridad Social como en hospitales públicos.

El representante oficial informó que el costo mensual de la hemodiálisis es de aproximadamente 2.500 a 3.000 bolivianos; en el sector público. Sin embargo, la cifra puede duplicarse si se trata de centros privados. En caso de necesitar un trasplante el costo se multiplica.

FALENCIAS

Durante las verificaciones que realizó la Defensoría concluyó que en los hospitales de la seguridad social, no se cuenta con la suficiente cantidad de personal especializado para las unidades de hemodiálisis. Además se advierte la carencia de médicos especialistas en nefrología.

Otro de los aspectos que resaltan es que el personal técnico especializado para el mantenimiento preventivo y correctivo de los equipos de hemodiálisis son insuficientes.

PERSONAL DE APOYO

De acuerdo con las Normas de Hemodiálisis emitidas por el Ministerio de Salud, a través de la Dirección General de Servicios de Salud y el Programa Nacional de Salud Renal, las unidades de hemodiálisis deberían contar con personal de apoyo como un psicólogo, trabajadora social y nutricionista, sin embargo, este personal no es exclusivo de las unidades, sino pertenecen a los hospitales.

EQUIPOS

Los equipos con los que cuentan las unidades de hemodiálisis, de los nosocomios públicos son insuficientes, lo que origina que la capacidad de atención, en relación al número de pacientes que se atienden, sea rebasado, debiendo habilitar turnos en sábado y domingo, feriados y en las noches, lo que implica un permanente funcionamiento de las máquinas, lo cual se ve agravado ante la falta de personal de mantenimiento. En épocas altas se ven en la necesidad de comprar servicios de hemodiálisis.

RECOMENDACIONES

En atención a lo que establece la Constitución Política del Estado en su Art. 222, inciso 5., que otorga a la Defensoría del Pueblo la atribución, emitió las siguientes recomendaciones, a los presidentes de la Caja Nacional de Seguridad Social y la Caja Petrolera y a los directores de los hospitales de la seguridad social verificados:

Prever la dotación de ítems para médicos especialistas nefrólogos, médicos de apoyo y auxiliares de enfermería en los hospitales verificados, además para el personal de mantenimiento de las máquinas.

Contar con un plan de capacitación técnica y permanente. también viabilizar la compra de equipos (máquinas) para las unidades de hemodiálisis de los hospitales.

Elaborar e implementar un plan de contingencia que permita brindar a los pacientes una atención oportuna y de calidad, tomando en cuenta la compra de servicios o la habilitación de turnos. Además de capacitaciones a todo el personal.

Habilitar los espacios físicos necesarios (salas de aislamiento para portadores de hepatitis B, C y VIH).