El despido de trabajadores de Enatex causó malestar en los empleados de la empresa estatal. Al respecto, la ministra de Desarrollo Económico, Verónica Ramos, sostuvo que la extrema decisión asumida apunta a salvar la empresa, ya que el número de trabajadores rebasa la capacidad de la misma.
Se conoce que ya fueron despedidos 30 trabajadores y otros voluntariamente aceptaron la invitación de la administración para dejar su fuente de trabajo, se calcula que ya habrían dejado su puesto de trabajo más de 200. La Central Obrera Boliviana anunció que solicitará informe de la situación de Enatex.
El financiamiento de más de $us 20 millones se destinó una parte para el pago de los empleados y también sería para la cancelación de los beneficios. También para la compra de materia prima.