Menor crecimiento

El Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Banco Mundial (BM) han coincidido en las últimas horas en anticipar que el crecimiento de la economía boliviana en el año 2015 será inferior a 5%.

PETRÓLEO ORO ESTAÑO El precio subió en la semana en respuesta al informe mensual de la Agencia Internacional de Energía (IEA), auspiciada por los países desarrollados de occidente, que dice que la demanda está creciendo de forma inesperada en algunos países en parte impulsada por los bajos precios. La producción de petróleo shale en EEUU también está cayendo más rápido de lo que se esperaba y seguirá cayendo aún más durante la segunda mitad del año, asegura la IEA. El precio del oro sigue cayendo como resultado de una menor demanda por el metal en físico de los mercados. A esto se sumó ayer el comentario de un representante del FED de Estados Unidos, que dijo que su país vive un período de deflación lo que ha reducido aún más la demanda por el metal. Otro comentario del FED, que es algo parecido al Banco Central, fue en sentido de que esperan elevar las tasas de interés antes de fin de año. Según las cifras del primer bimestre de 2015 el valor de las exportaciones de estaño de Bolivia cayó en 20,12% con respecto al mismo periodo del año pasado. Esto se puede atribuir en parte a la caída en el precio del estaño en el mercado internacional. Sin embargo, el precio sólo ha caído en 15,93% en el mismo período. La explicación es que la producción de estaño de Bolivia ha caído en 10,89% en el primer bimestre de este año comparado con el mismo período de 2014.

El presidente Evo Morales ha dicho que el FMI no tiene autoridad moral para anunciar que el crecimiento será menor de 5%, y ha propuesto a los bolivianos que crean al INE.

Si se tratara de autoridad moral es difícil que el INE le gane al FMI o viceversa. Lo que se podría concluir es que, en cuestión de crecimiento económico es mejor tomar en cuenta las cifras y la realidad y no la autoridad moral.

Dice el Presidente que el crecimiento de este año será de 5% y que, por lo tanto, será este el tercer año consecutivo en que se pague el segundo aguinaldo en el país.

El expresidente del Banco Central, Juan Antonio Morales, ha dicho que el país está entrando en una etapa de provocada por las devaluaciones que hacen de sus monedas los países vecinos.

La inflación negativa del mes de marzo, registrada por el INE, sería la prueba de que las devaluaciones vecinas están influyendo en los precios del mercado boliviano.

A todo esto, el ministro de Economía, Luis Arce Catacora, ha dicho que él tiene la autoridad para elevar o bajar en diez puntos la cotización del dólar norteamericano.

Es la primera vez desde que el MAS está en el Gobierno que se menciona la posibilidad de que la paridad cambiaria sea cambiada, lo que crea una posibilidad de incertidumbre en el país.

El temor es que los 13.000 millones de dólares que están depositados en el sistema bancario en moneda nacional puedan ser convertidos en la moneda extranjera y de esa manera se produzca una corrida de ahorros.

Nadie desea que eso ocurra, pero el Gobierno no está mostrando capacidad de reacción ante la actual realidad en que los países vecinos, con monedas devaluadas, comienzan a provocar problemas en Bolivia.

Hay autobuses que llegan de Brasil a Bolivia y que son detenidos por la Policía boliviana por temor a que estén transportando arroz o azúcar.

Esos productos que llegan de Brasil o Argentina son tan baratos que desplazan del mercado boliviano a los productos nacionales.

Por primera vez en nueve años, el Gobierno del MAS tiene la oportunidad de mostrar que es capaz de tomar medidas económicas inteligentes, y demostrar que todo lo que ha hecho hasta ahora es beneficiarse de los precios internacionales muy inflados.

Este es otro tema que podría ser incluido en la cumbre agropecuaria en vista de que estos productos están entre los más afectados por la fortaleza artificial del boliviano.

El ministro de Economía, Luis Arce Catacora, dice que él tiene autoridad y facultades para modificar el tipo de cambio respecto del dólar en 10 puntos, ya sea para arriba o para abajo.	El presidente Evo Morales asegura que la moneda fuerte que existe en Bolivia, y que no será cambiada, es una garantía de que el crecimiento de este año será de por lo menos 5%.