Producto de la contaminación del lago Titicaca, los grandes anfibios o ranas gigantes (Telmatobius culeus), únicos en el mundo, mueren y agonizan en la superficie a orillas de la isla Pata Patani, informó ayer la agencia Erbol.
Por la carencia de una política ambiental estatal que evite la contaminación del recurso hídrico con los miles de litros de aguas residuales provenientes de El Alto, Laja y Viacha, que ingresan cada día a la región lacustre, se pierden muchas especies endémicas; como estos especímenes únicos en el mundo.
“Las ranas gigantes o jach’a jampatus (grandes sapos en aymara) sólo habitan en el fondo del lago Titicaca, nunca las podemos ver en la superficie, esto no es posible creerlo. algo pasa con las aguas”, exclamó el comunario de Pata Patani, Teodoro Mendoza, quien recogió descalzo y con sus propias manos los anfibios que se encontraban muertos y agonizantes debajo de las algas a orillas de la isla.