La Unidad de Turismo del Municipio realizó el primer recorrido de las rutas Arquitectónicas Andinas Alteñas, con el principal objetivo de promocionar e impulsar los diseños típicos de estas infraestructuras.
“Como municipio estamos, constantemente, renovando actividades para promover turísticamente los diferentes lugares que tiene la urbe, esta actividad fue todo un éxito ya que hemos sobrepasado las inscripciones, además de tener la presencia de productoras extranjeras que harán documentales en base a esta temática arquitectónica”, informó el responsable de Promoción Turística del Municipio, Diego del Carpio.
RECORRIDO
El recorrido inició a las 7.45 del pasado sábado 25 de abril, con un tours desde el mirador Faro Murillo, para luego visitar el Museo Antonio Paredes Candia de la zona Ciudad Satélite y el mirador Virgen Blanca del mismo sitio.
Posteriormente, se emprendió una ruta arquitectónica primero se visitó dos casas ubicadas en la avenida Cívica, tres por la carretera a Viacha y dos por Villa Bolívar ‘A’.
“Estas infraestructuras fueron diseñadas con la identidad andina que tienen los alteños para hacer negocios y habitar; si observan en el primer piso están los centros comerciales, en el segundo piso están los locales y en los pisos de arriba los departamentos y más arriba un pequeño chalet donde habita con todas las comodidades el dueño de la casa”, refirió el funcionario edil.
En el recorrido turístico participaron dos amautas quienes explicaron el significado de las iconografías y colores que se utilizan en estas infraestructuras.
“En estas casas se utilizan con frecuencia las chakanas (Cruz Andina), como las invertidas, media invertidas y las cuartas invertidas, estos diseños son frecuentes en las puertas o ingresos a las casas, que significa el camino que recorre el ajayu y la protección de quienes habitan el lugar”, explicó el amauta expositor, Víctor Machaca.
Señaló que a veces se observan algunos diseños con leones u otros animales que demuestran grandeza, esto significa el poderío y resguardo para la casa.
“Los colores oscuro y claro en el mundo aymara demuestran superioridad o inferioridad, los cholets poseen colores vivos de la naturaleza y del sol, colores inspirados en el arco iris o el aguayo”, dijo Machaca.
La mayoría de estas viviendas, remarcó el sacerdote, se encuentran al este, vista al sol, para buscar la energía cósmica y poseen bastante luz que transmite energía.
Los cholets tienen un costo de aproximadamente un millón de dólares y la más cara de dos millones y medio. Cabe destacar que se sitúan en diferentes sitios de esta urbe.
El recorrido tuvo una duración de cinco horas y se prevé que se lleve adelante una segunda ruta hacia el norte de la ciudad a mediados de este año.
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