El exvocal de lo que fue la Corte Nacional Electoral, Jorge Lazarte, manifestó que lo que está pasando en Bolivia es un desastre porque parecería que en las elecciones lo único que cuenta es el voto y no el derecho al voto entendiendo que el voto no es simplemente poner la papeleta sino que ese es un derecho que debe tener garantías y estar protegidos por organismos especializados.
Explicó que para que estos organismos protejan esos derechos tienen que haber autoridades que reúnan al menos tres requisitos: Que sean competentes y sepan lo que están haciendo, para no cometer errores crasos, que no tengan sesgos políticos y que definan sus fallos de manera imparcial y estos tres atributos son los que están fallando en Bolivia.
Aseveró que con estas actitudes se está creando más resistimiento en la población que no demorará en preguntarse si vale la pena ir a votar, actitud que en su criterio sería grave.
“Una prueba es nuestro pasado, el que siempre se ha votado y eso nunca ha impedido que se produzcan asonadas, golpes y la conocida inestabilidad política”, sostuvo.
Por otro lado, dijo que los procesos electorales en Bolivia no están cumpliendo con los estándares internacionalmente aceptados para considerar que son elecciones democráticas.
“Cualquier proceso electoral que puede ser calificado de democrático, tiene que reunir ciertas condiciones y esos criterios están fallando gravemente en Bolivia”, aseguró.
Sin embargo, apuntó que la responsabilidad no solamente es de los miembros del Órgano Electoral sino de quienes de manera exclusiva los han elegido (Gobierno).
“Había un vicio de origen que es la forma cómo el Gobierno los ha elegido y luego la precedencia de quiénes han sido elegidos, por el momento pareciera que no hay manera de remediar este hecho y es muy grave, puede salir cualquier cosa adelante cuando el proceso electoral pierde credibilidad, el organismo electoral entra en crisis de confiabilidad y peor aún en un proceso de descomposición”, afirmó.
Manifestó que se han cometido demasiadas falencias, “realmente lo que llama la atención es que el Gobierno no asume su responsabilidad porque el Presidente ha pedido la renuncia de uno de los miembros de la CIJ porque está vinculado con una de las partes, en este caso con Chile, le ha dicho que debería irse, ese mismo criterio debería aplicar a Bolivia, donde no es uno que tiene o ha tenido vinculaciones con el partido de Gobierno, son demasiados los que han tenido esa vinculación, no se puede pedir a otros lo que uno no está dispuesto a hacer aquí”, afirmó.
BENI
Aseveró que en el Beni están pasando demasiadas cosas, incluyendo el anuncio precipitado del Presidente. “Cómo pueden saber ellos hasta de cómo han ganado, hay demasiado misterio en todo esto, demasiadas cosas que no se saben, fuera de las actas que están observadas. Las irregularidades hacen dudar sobre la limpieza del proceso electoral”, señaló.
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