El dirigente boliviano Róger Bello fue blanco de algunas críticas en medios argentinos y nacionales, porque se le vio bastante dubitativo en la tarea de veedor que se llevó adelante en el encuentro Boca Juniors- River Plate que se disputó el jueves en La Bombonera. Tras la acción criticable de los hinchas de Boca Juniors, que lanzaron gas pimienta a los jugadores de River Plate, el partido se suspendió porque varios jugadores del elenco albirrojo estaban afectados. Ingresó Róger Bello al campo de juego, conversó con los jugadores y dirigentes de ambos planteles, pero no tomó ninguna decisión. Se lo vio bastante nervioso a Bello, deambulando de un lado a otro, pero sin tomar una decisión. Tuvo varias comunicaciones, pero no se llegaba a ninguna decisión. Ese hecho fue cuestionada a la máxima autoridad del partido, en su calidad de veedor del encuentro. Tras las más de dos horas de incertidumbre, al final se decidió suspender el encuentro, en medio los fuertes cuestionamientos de los jugadores y entrenadores. Al salir, Bello tampoco dijo nada, solo dejó supeditado todo a un informe.