Activistas de diferentes fundaciones cuestionaron ayer la aprobación del proyecto de ley de protección animal en la Cámara de Diputados, ya que el mismo permite la tortura de animales domésticos a través de la vivisección y que niega la protección y el derecho de defensa de los animales silvestres.
En ese marco, la fundación Qanasa se declaró en estado de emergencia por la aprobación de la norma de defensa de los animales contra actos de crueldad y maltrato por considerar que legaliza la tortura de animales domésticos.
Entretanto, la presidenta de Animales SOS, Susana Carpio, criticó, el tratamiento del proyecto de Ley Contra la Crueldad y el Maltrato Animal, manifestando que no brinda protección para los seres vivos que pierden la vida en ritos tradicionales y son usados para medicina natural. Además, señaló que la norma es inconstitucional.
Sin embargo, las disposiciones finales de la Ley, aprobada en Diputados, exceptúan de su aplicación a los actos ejercidos en la medicina natural y ritos que se rigen de acuerdo con la cultura y tradiciones.