Paola Barriga, abogada de una de las enfermeras del Hospital del Niño, afirmó ayer que el la Gobernación, a la cabeza de César Cocarico, pretende encubrir el historial de maltrato del cual fue víctima el bebé Alexander desde que fue internado en el hogar Virgen de Fátima (ahora denominado Niño Jesús) de agosto al 13 de noviembre del año pasado, cuando fue evacuado al Hospital del Niño con un cuadro de neumonía y broncoaspiración.
Las declaraciones se dieron a la salida de la cuarta suspensión de audiencia para aperturar la inasistencia del equipo jurídico del Servicio Departamental de Gestión Social (Sedeges), dependiente de la Gobernación y el pedido del fiscal Edwin Blanco.