Emplazan al Gobierno exigir a Chile libre tránsito

A seis días de huelga de funcionarios de la Aduana de Chile, más de 1.200 camiones del transporte pesado internacional continúan detenidos en la frontera con el país transandino en las rutas vinculadas a los puertos de Arica, Antofagasta e Iquique. Este perjuicio hace que se paralice el flujo de importaciones y exportaciones del país. La anómala como injustificada situación ha comenzado a generar millonarias pérdidas. Dirigentes del transporte exigen al Ministerio de Relaciones Exteriores de Bolivia invocar el cumplimiento del Tratado de 1904, según indicó, Braulio Herrera, representante del sector en Oruro.

FLUJO COMERCIAL

El comercio de ida y vuelta es más intenso en Arica por donde se movilizan alrededor de 2 millones de toneladas de carga. El comercio exterior del país mueve una décima parte del total de su por el puerto de Antofagasta y algo menos del 6 por ciento por Iquique por donde circulan anualmente no más de 200.000 toneladas, según informe proporcionado por Manuel Cañas, gerente de Iquique Terminal Internacional (ITI).

PARO INDEFINIDO

“El paro en Chile es indefinido y es lo que más nos preocupa, porque si bien es interno de Chile, no permite el libre tránsito del transporte como manda el Tratado de 1904. Es por eso nuestra preocupación para que las autoridades de Gobierno y sobre todo de la Cancillería puedan pronunciarse e interponer sus buenos oficios a fin de evitar perjuicios los sectores productivos del país”, indicó.

El representante de transporte internacional puso en evidencia que no ser la primera vez en que funcionarios chilenos perjudican a su sector obstaculizando el libre tránsito, “generando una pérdida de 438 mil dólares al momento en el pago de pernocte, combustible, y alimentación por cada conductor de los 1.200 retenidos a la fecha”, detalló Herrera.

En la jornada, caravanas de siete vehículos pudieron salir de Chile hacia Bolivia, sin embargo, no ocurre lo mismo con los camiones que deben salir del país hacia los puertos de Chile, los cuales continúan retenidos y cuyos conductores enfrentan condiciones infrahumanas para poder atender sus necesidades básicas. Ellos se encuentran varados en frontera, sin atención médica, alimentos, primeros auxilios o ambientes para pernoctar. Los porteadores no pueden abandonar sus camiones por temor al robo de mercadería o de autopartes, pero al mismo tiempo deben enfrentar multas por incumplir entregas de mercadería sujetas a contrato, tanto en puerto como en las ciudades de destino.

PÉRDIDAS

INCALCULABLES

José Luis Evia, economista de la Cámara Nacional de Comercio y Larry Serrate, expresidente de la Cámara de Exportadores de La Paz (Camex), observaron ayer que las pérdidas en seis días de paro indefinido de funcionarios chilenos son incalculables y que a la larga afectará el nivel de producción de las empresas en el territorio nacional.

IMPORTACIONES

“Las importaciones llegan a 10 mil millones de dólares y en un mes es 900 millones, a ello se debe reducir las pérdidas económicas de seis días que se cumplen en el día, pero sino existen tareas diplomáticas que deben demandar a solución del conflicto, porque las pérdidas afectarán a las empresas productoras en todo el país”, observó Evia.

Para la Cámara de Comercio el incumplimiento del Tratado de 1904 por parte de Chile, por un conflicto interno genera perjuicios a Bolivia. Eso es lo que preocupa al sector, por lo que solicitan que las autoridades de Gobierno (Cancillería) logren realizar no sólo representación diplomáticas que exige este delicado tema sino verificar en el sector cómo se encuentran los conductores bolivianos, al continuar obligados a someterse a los conflictos ajenos por cerca de una semana, remarcó Serrate.