Advierten con dejar de producir marraqueta

Julio Mamani, representante de los panificadores, advirtió a las autoridades de Gobierno que si no se lleva adelante una reunión entre ambos sectores durante esta semana se eliminará la producción de marraqueta.

“La determinación de la organización es a nivel nacional, ante la desatención de las autoridades de Gobierno quienes después del cuarto intermedio de las medidas depresión, han preferido no convocar a ninguna reunión, es por eso que advertimos con retomar nuevamente en esta semana nuestras medidas de presión”, explicó.

Los panificadores dieron conocer que la harina que fue entregada a su sector por parte del Gobierno en el mes de marzo, estaría acabándose en los próximos días. Razón por la que explican que su sector acudirá al mercado con la finalidad de adquirir la harina comercial, la cual estará destinada sólo a la elaboración de “pan redondo”.

“Ahí sí le vamos a dar una cruz al pan de batalla”, indicó Mamani a momento de detallar que supuestamente el gramaje en la elaboración del pan redondo se mantendrá en 60 gramos, mientras que la marraqueta tiende a desaparecer ante la ausencia de quintales de harina que deberían ser entregados por Emapa.

“Las tiendas de Emapa están entregando una bolsita a las amas de casa y a nivel de los panificadores no vamos a acudir por una bolsita, es por eso que buscamos mediante el diálogo que esta instancia entregue los quintales de harina si se busca abastecer con marraqueta”, remarcó.

Por día, el sector de los panificadores requiere entre cinco a seis quintales de harina, los cuales deberían ser entregados, según los dirigentes, por la instancia estatal, factor en el que los panificadores aguardan llegar a un acuerdo con las autoridades de Gobierno, de lo contrario este sector se mantendrá en estado de emergencia.

FEJUVE

Por su parte, la dirigencia de la Federación de Juntas Vecinales (Fejuve) de El Alto lamenta que la determinación de un sector que monopoliza la elaboración del pan sea el que solo busca sus propios intereses afectando la economía de la población, reduciendo peso y tamaño en la actual elaboración del pan que es destinado sobre todo a las familias de escasos recursos.

“Como organización vamos a solicitar las inspecciones correspondientes a los hornos en esta ciudad y en caso de encontrarse la cantidad de quintales de harina que ellos están acumulando, solicitaremos que sea confiscado en caso de que no quieran elaborar la marraqueta”, expresó Renán Cabezas, dirigente de Fejuve.

Para el representante de la organización cívica, los panificadores estarían castigando a las familias más pobres quienes son los que adquieren el pan de batalla, no sólo por el precio, sino por el peso y Tamayo, con la finalidad de que pueda abastecer y apetecer el hambre de sus integrantes (menores), quienes son los que más requieren este alimento.

Asimismo, la organización observa con peligro que dicho sector pretenda incrementar el precio del principal producto de la canasta familiar sin que vea los otros perjuicios que afectarán a las familias de escasos recursos, como el incremento de otros productos que están relacionados con la canasta básica que requiere una familia.

Cabezas anunció que su organización aún se mantiene en estado de emergencia y que saldrán en defensa de los recursos de las familias alteñas.

GOBIERNO

Por su parte, el gerente de Emapa, Avelino Flores, señaló que no habrá diálogo con el sector de los panificadores mientras no se normalice la producción de pan de batalla o marraqueta. La afirmación la realizó luego de verificar que en los puestos de venta de la ciudad de La Paz no se comercializa el producto.

“Se convocará al diálogo cuando ya (…) la oferta del producto del pan sea normal, en La Paz no hay la presencia de la marraqueta, desapareció por arte de magia, eso no puede seguir”, mencionó Flores.