El canciller David Choquehuanca convocó al cónsul de Chile en Bolivia, Milenko Skoknic, para hacerle conocer la queja del Gobierno boliviano sobre el paro de Aduanas de ese país, que ha retenido en la frontera a 2.000 camioneros bolivianos. Dijo también que la pérdida económica provocada por el paro debe ser solventada por Chile.
“(Los camioneros) están a temperaturas bajo cero, esperan poder cruzar la frontera hace ya seis días, tienen riesgo de pérdida de productos perecederos, como alimentos y otros. Igual de seria es la situación humanitaria de miles de transportistas bolivianos que no tienen acceso a servicios básicos, alimentación en frontera, la falta de hospedaje, abrigo o alimento es una clara violación a los derechos humanos de esas personas”, dijo.
Los transportistas calculan en 200 dólares por día por cada camión el perjuicio económico que sufren debido a este paro. Por lo tanto, el perjuicio total es de unos 2.4 millones de dólares hasta la fecha.