El papa Francisco instó a los cristianos a “protegerse del riesgo de la corrupción” y a no dejar que su dignidad se diluya para no envilecerse y ser “mediocres, tibios e insípidos”.
Durante la misa oficiada con motivo del Corpus Christi a los pies de la basílica romana de San Juan de Letrán, el pontífice invitó a los presentes a reflexionar sobre la necesidad de no envilecerse y se refirió a algunos casos en los que se corre el riesgo de caer en ello.
Tanto en La Paz como en Santa Cruz y otros departamentos, a más de un mes de la llegada del papa Francisco los actos litúrgicos se realizaron al aire libre.