Publican antología de cuentos sobre la Guerra del Chaco

(EFE).- Narraciones de escritores como el paraguayo Augusto Roa Bastos o el boliviano Augusto Céspedes, ambos testigos de primera fila de la Guerra del Chaco, comprenden una antología de relatos sobre esa contienda que será presentada en Asunción con motivo de un nuevo aniversario del final del conflicto.

Seis cuentos bolivianos y seis cuentos paraguayos de la Guerra del Chaco es el título de una obra que se publicó en 2011 y que ahora, ya agotada, volverá a estar a disposición de los lectores desde el próximo martes, cuando será lanzada en el Centro Cultural El Cabildo, informaron los organizadores.

La nueva edición será presentada unos días antes de que Paraguay celebre el Día de la Paz del Chaco, el 12 de junio, festivo en toda la nación y que conmemora el tratado firmado entre los dos países que puso punto final a la guerra (1932-1935).

La guerra fue catalogada como “estúpida” por Céspedes, quien la cubrió como periodista para el diario boliviano El Universal y es uno de los autores componentes de la antología que la vivieron de forma directa.

Es el caso de Roa Bastos, quien se alistó muy joven como enfermero para participar en la que también se llamó “guerra de la sed”, debido al sufrimiento causado en los dos lados por la escasez de agua, en una naturaleza caracterizada por el implacable calor y la sobreabundancia de insectos.

Junto a ellos, el libro aporta relatos del folklorista boliviano Víctor Varas, del reputado poeta y crítico literario paraguayo Hugo Rodríguez Alcalá y de Teresa Lamas, autora de Tradiciones del Hogar (1921), la primera novela escrita en Paraguay por una mujer.

El libro se vuelve a publicar como recuerdo de que la paz se impuso a la guerra y de que se ha consolidado entre los dos países a lo largo de los años, en palabras del senador Blas Llano, presidente del Congreso, que tiene en el Centro Cultural El Cabildo su brazo cultural.

“Al gozar de las inspiraciones de doce sobresalientes escritores, nos unimos al ideal de una paz duradera, garante y guía del desarrollo integral de Bolivia y Paraguay”, dijo Llano a través de un comunicado.

En Paraguay, cada 12 de junio se rinde tributo a los cerca de 900 supervivientes que combatieron en esa guerra.