Declaraciones desatinadas

Las declaraciones de un Ministro y del propio Presidente del Estado Plurinacional contra el Padre Mateo Bautista son ofensivas contra la tarea humanista que enmarca una profunda sensibilidad social de la Iglesia.

Considero que las autoridades no pueden coartar las actividades que se desarrolla a favor de los pobres y los humildes.

Nadie tiene por qué sentirse afectado por señalar que se requiere con urgencia mejorar la salud en Bolivia. En nuestro país grandes sectores sociales no reciben asistencia por las enfermedades que padecen y sufren, además, por pan, techo y trabajo. Los servicios de salud no cubren ni las mínimas exigencias que demandan muchas enfermedades. El índice de mortandad por carencia de atención en hospitales es un lastre tremendo.

Tal vez las autoridades oficiales nunca se han aproximado a los centros hospitalarios para ver que muchos enfermos esperan horas y horas para conseguir atención, incluso de emergencia. Ni qué decir cuando una persona necesita ser atendida en policlínicos de especialidad, donde debe permanecer en largas filas desde las cuatro o cinco de la mañana, soportando el frío de invierno en la calle y recibir como medicamentos únicamente los consabidos diclofenacs, aspirinetas, complejo B, o ampicilinas.

Para ser programados en atención de tomografía, resonancia, magnética, análisis de sangre, de orina, ecografía, radiografía, fisioterapia y otros se espera a veces no sólo semanas sino meses. La atención de salud en Bolivia es una de las más deficientes del planeta.

Parecería existir recursos económicos para frondosos viajes, salarios desmedidos en algunas empresas, reuniones cumbres, movilización de organizaciones sociales para respaldo político, con gran dispendio económico, menos para salud.

Es lamentable que se quiera desvirtuar la labor pastoral en busca de justicia social y esa tarea no debería ser calificada políticamente como de derecha o izquierda. ¿Qué es derecha o izquierda?, son epítetos que en pleno Siglo XXI no tienen asidero. Habría que abrir un gran debate político sobre doctrinas políticas, lo que sí es evidente es que el marxismo leninismo, donde dicen que está la izquierda, ya fue derrotado históricamente y responde a las añoranzas de un pasado que sólo es admitido por mentes retrógradas y anquilosadas.

Hoy se debe unir esfuerzos y dejar de ideologizar los anhelos de mejorar condiciones de bienestar, y elevar la calidad de vida de todos.

No se puede negar que constituimos todavía uno de los países más pobres y postergados de América Latina, donde los servicios de educación y salud sufren tremendas limitaciones.