Bolivia sin “tren bioceánico” por paros y bloqueos

China atrae el 70% de las inversiones extranjeras del mundo, con políticas gubernamentales que garantizan las inversiones privadas, respetando sus investigaciones de ciencia y tecnología. Al convertirse en potencia económica, comercial, industrial y tecnológica, necesita trasladar grandes cantidades de materias primas para su gran industria y mercado expansionista.

CIENCIA Y TECNOLOGÍA PRIVADA

En China las inversiones para las investigaciones de ciencia y tecnología están a cargo de empresas privadas y, posteriormente, por resultados exitosos reciben subvenciones del Estado chino, para lograr patentes y monopolios. Pero sus productos acabados o mercaderías son made in China. Por eso la tecnología no se la puede transferir y regalar. Y no como en el bloque socialista, donde las investigaciones de ciencia y tecnología estaban a cargo del Estado, pero fracasaron.

PROYECTO DE CHINA

El mega-proyecto tren bioceánico es de China, que invierte mucho dinero, impone su diseño, trazando una ruta por los territorios de Brasil y Perú; también impone su tecnología y excluye al territorio boliviano porque aquí son frecuentes los paros y bloqueos sindicales.

China hace estudios sociales, políticos y técnicos para pronosticar el volumen de tráfico; seleccionar las posibles rutas; identificar los parámetros técnicos del ferrocarril; completar la organización de la ferrovía; preparar los criterios de diseño de los equipos principales; proyectar el periodo de construcción, para trasladar materia prima de Brasil y Perú y retornar productos acabados o mercadería china.

El tren que unirá los océanos Pacífico y Atlántico, a través de territorios peruanos y brasileños, con un trazado entre el puerto Bayovar en Piura, Perú, con el puerto Acu de Brasil, facilitará el intercambio comercial con el puerto chino de Tianjin.

CHINA SIN SINDICATOS

El secreto del crecimiento económico chino se debe, básicamente, a la fabricación de productos con mano de obra barata, sin sindicatos que aíslan las inversiones, con productividad relativamente alta, una política gubernamental favorable, con enorme superávit comercial. Las empresas controladas por capitales privados representan más de dos tercios de la economía y el peso de la propiedad pública es pequeño. Las inversiones extranjeras generan desarrollo tecnológico y empleos para millones de chinos.

En China los sindicatos no fijan los precios ni salarios, sino la “economía socialista de mercado” (liberal), según la oferta y la demanda, y todos libremente pueden trabajar y comerciar, sin necesidad de pertenecer a algún sindicato. En China no hay paros y bloqueos sindicales.

BOLIVIA CON SINDICATOS

Por el contrario, en nuestro país para vender, negociar y trabajar hay que sindicalizarse, pagando los derechos de ingreso e inscripción, cuotas continuas, más que los impuestos de ley. El sindicalismo boliviano resulta un elemento de atraso, hambre, discriminación y frena el desarrollo. Los beneficiados fueron unos pocos que lucraron a costa del sindicalismo.

Bloqueos sindicales en caminos perjudican a quienes viajan al interior y exterior del país, obligando a transportistas a quedarse detenidos en diferentes zonas.

Los chinos seguramente tomaron en cuenta los paros, marchas y bloqueos en caminos de Bolivia. Estos bloqueos pueden perjudicar el rápido traslado de materias primas de Brasil y Perú a China.

En América Latina, los sindicatos bolivianos son los que hacen más paros y bloqueos, impidiendo el desarrollo económico social y causando la exclusión de Bolivia del mega-proyecto del tren bioceánico.

Para desbloquear caminos, el Gobierno boliviano cada vez utiliza la fuerza policial con duros enfrentamientos con los bloqueadores, a veces con heridos y muertos. Para participar en el mega-proyecto del tren bioceánico, el Gobierno boliviano debe normar paros, marchas y bloqueos, a fin de atraer inversión privada como China y salir del atraso tecnológico y analfabetismo digital.

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