Luego de 8 días
La ejecutiva de la Federación Departamental de Trabajadores de Educación Urbana de Oruro, Junnet Ojeda, suspendió ayer de su medida de presión luego de ocho días de no haber probado alimento ni bebida alguna, pues tenía los labios cosidos.
La determinación fue asumida luego de que Eduardo García, posesionado como director departamental de Educación, a fin de dar viabilidad y solución al conflicto, decidió delegar ese cargo al subdirector de Educación Regular, Roberto Mamani Magne, en calidad de interino, mientras se aclare el proceso de institucionalización, que fue bastante observado por los maestros.
Esto se logró en una reunión que se realizó ayer en la Brigada Parlamentaria de Oruro, con la participación de varios diputados, además de los representantes del Comité Cívico, Defensoría del Pueblo, Central Obrera Departamental (COD), Comisión de Derechos Humanos de la Cámara de Diputados, Trabajadores de la Dirección Departamental de Educación, la Junta de Distrito de Padres de Familia, la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea Departamental de Oruro y los representantes del magisterio urbano de Oruro.
Luego de un amplio análisis y la petición de diversas instituciones de que García pueda dar un “paso al costado”, para que Ojeda deje su medida de presión que deterioró su salud bastante.
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