Caso barcazas
(ANF).- El caso de corrupción en la Empresa Naviera Boliviana (Enabol) por la compra irregular de 16 barcazas y dos remolcadores a la empresa General Marine Business (GMB) está pronto a encontrar solución por las gestiones entre Bolivia y la parte constructora, informó el embajador de la República Popular de China en Bolivia, Wu Yuanshan.
“Estamos ayudando a solucionar este problema que es heredado desde hace cinco o más de cinco años, pero creo que pronto va a tener una solución”, aseguró el diplomático a la ANF tras la firma de un convenio con la Gobernación de La Paz para la enseñanza del idioma chino.
En 2012 se reveló que la estatal naviera pagó al contado cerca de 30 millones de dólares a una empresa GMB por la construcción de las 16 barcazas, dos remolcadores y el transporte de los bienes desde la República Popular de China hasta el puerto argentino Rosario, mismos que debían ser entregados a fines de 2010.
El ministro de Defensa, Reymi Ferreira; el Procurador General del Estado, Héctor Arce y el Gerente General de la Enabol concurrieron a la audiencia de conciliación que convocó el Tribunal Marítimo de China, instancia en la que lograron frenar el remate de las barcazas, sin embargo el titular de Defensa informó por su cuenta de Facebook sobre las dificultades del caso: “la verdad que no está nada fácil, hemos logrado que no se rematen las barcazas, pero la solución final es muy compleja, como informaremos al retornar”.
“Se están contactando entre ambas partes, la parte boliviana y la parte constructora. Es una empresa coreana, en realidad es un negocio entre Bolivia y empresarios, hombres de negocios de Corea del Sur, entonces, claro, las barcazas fueron construidas en China pero queremos que se solucione”, expresó el Embajador.
El Tribunal Marítimo de China, dictó una orden de remate después que el astillero donde están las 16 barcazas exigen el pago de 15 millones de dólares por concepto de almacenaje.
No obstante, el vicepresidente Álvaro García Linera, anunció en más de una oportunidad que el Estado no iba a pagar un solo centavo más por los productos, ya que en 2010 se había cancelado la totalidad del costo es decir casi 30 millones de dólares.
Por su parte, Ferreira en otra oportunidad dio prácticamente por perdidas las barcazas y los remolcadores principalmente por el deterioro que habrían sufrido después de más de cuatro años de haber sido construidas.
Entre tanto en el Ministerio Público poco o nada de información existe en referencia al caso de las barcazas chinas. Tampoco se dio una respuesta sobre la posibilidad de que hubiera responsabilidad en funcionarios del Banco central de Bolivia (BCB) quienes ocasionaron la caducidad de las boletas de garantía.
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