Envían a dos efectivos militares a justicia ordinaria

El director departamental de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (Felcc), coronel Gary Omonte, informó ayer sobre la aprehensión y posterior remisión de dos ciudadanos que serían efectivos de las Fuerzas Armadas y a quienes se los denunció por extorsionar a los transportistas en inmediaciones de la localidad de Patacamaya.

El jefe policial dijo que el caso ocurrió el domingo a eso de la 01.30 cuando ambas personas fueron sorprendidas en el sector de Alto Patacamaya, a quienes sindicaron de estar extorsionando a los comerciantes que trasladan mercadería de la frontera hacia la ciudad de La Paz.

“Fueron sorprendidos por efectivos de la Policía Caminera”, dijo el coronel Omonte al mencionar que los sospechosos son el sargento segundo de caballería José Miguel V. y el administrativo quinto Constancia M., ambos pertenecerían al Regimiento Calama que se encuentra asentado en esa región.

“Estamos realizando la investigación para establecer si hay otros componentes y certificar si son miembros de las Fuerzas Armadas”, afirmó.

EXTORSIÓN

Producto de la acción en el que fueron sorprendidos el caso fue derivado a la judicatura de El Alto, donde el Juez de la causa dispondrá lo que corresponde en ley, afirmó el coronel Omonte.

De acuerdo con la investigación realizada estas dos personas se ubicaban en caminos adyacentes de la carretera troncal, por donde transitan vehículos que transportan mercadería de la frontera hacia la ciudad de La Paz.

“En este lugar los extorsionaban pidiendo dinero y en el último caso querían dos mil dólares y también se encontró en un minibús que estaban conduciendo algunos artefactos eléctricos como ser microondas y televisores (32 pulgadas)”, dijo.

Por el testimonio de las víctimas que brindaron en sus declaraciones a las autoridades, estas dos personas se identificaban como miembros del Control Operativo Aduanero (COA).

El coronel Omonte indicó que el caso corresponde al distrito de Sisa Sica, sin embargo, la audiencia de medidas cautelares contra los acusados no se llevó adelante en esa población, porque los habitantes buscan agredirlos.